Biocastanea pone el acento en la castaña como recurso contra la despoblación

El director de la Mesa del Castaño del Bierzo, Pablo Linares, pidió, ayer a las administraciones ,una apuesta firme por la castañicultura como parte de la lucha contra la despoblación del medio rural. Lo hizo en la apertura de la décimo cuarta edición de Biocastanea, que comenzó con las jornadas científico-técnicas que se celebran también hoy en el Campus de Ponferrada, con la participación de 20 expertos internacionales.

El sector de la castaña «está muy asociado a zonas rurales y despobladas», subrayó Linares, destacando además «la excepcionalidad» del Bierzo como una de las pocas zonas productoras de Castilla y León. «Les intentamos hacer ver que si estamos dándole vueltas y hay veinte mil foros de debate sobre la España vaciada sobre cómo solucionar el problema de la despoblación, solo hay una vía, la de generar recursos en las zonas rurales. La castaña, junto a otras alternativas, es una de esas vías», defendió el director d e la Mesa del Castaño, que también dirigió sus palabras en el sentido de la propia población. «Los habitantes también debemos darnos cuenta de dónde están nuestros nichos de mercado», dijo.

En cuanto a los retos del sector de la castaña en El Bierzo, la profesionalización y la transformación siguen siendo las asignaturas pendientes. «El problema es la atomización», explicó Linares. El Bierzo cuenta con 18.000 hectáreas de castaños y apenas hay industria de transformación. «Estamos perdiendo mucho valor económico. Más de un 80% se transforma fuera de la comarca, la provincia e incluso del país. Tenemos que caminar hacia ese cambio de chip, de venta a granel a venta diferenciada, de venta en fresco a transformada», añadió el técnico.

«Podemos hacer mucho más de lo que se hace. Tenemos un valor muy importante y una producción destacable», concluyó Pablo Linares antes de que el director de la Escuela de Ingeniería Agraria y Forestal de la Universidad de León, Luis Herráez, insistiera también en el enorme valor del castaño, «no solo comercial, sino también a nivel medioambiental».

Herráez alabó el trabajo que se realiza desde la Mesa del Castaño del Bierzo. «Es tal el número de investigadores y técnicos que participan en estas jornadas, que se pone de manifiesto la importancia de este cultivo», dijo el director de la Eiaf minutos antes del inicio de unas jornadas técnicas que suponen un punto de encuentro para la presentación e intercambio de conocimientos, en el que se están dando a conocer los últimos avances en la investigación y técnicas sobre el estudio del castaño y sus productos de la mano de veinte investigadores de todo el mundo.

La conferencia inaugural corrió a cargo de la investigadora de la Universidad de Oviedo Asunción Cámara, que trabaja en Mieres en la «minería inversa» para transformar antiguos territorios mineros en zonas que apuesten por productos como la castaña. «Se puede pasar del negro al verde. Estamos muy enfocados en el tema de la restauración minera e intentar sacar un complemento económico para los propietarios de los montes», dijo. Cámara presentó también la plataforma ‘Juntos por los Bosques’ y habló sobre los retos del sector forestal en zonas mineras. «Mi mensaje es la unidad del sector», afirmó.

Las jornadas continúan hoy con conferencias en las que se hablará de producción vegetal y plagas y enfermedades, la gestión multifuncional, la biodiversidad y el cambio climático. También hoy, por la tarde, se inaugurará la Feria de la Castaña en el recinto ferial de Carracedelo. Participan medio centenar de expositores durante todo el fin de semana y habrá actividades complementarias y un magosto solidario.

La tercera pata del programa de Biocastanea son las demostraciones técnicas, que se desarrollarán mañana en el soto de Corullón, con poda de castaño, demostración de uso de drones, maquinaria de recogida y pelado y trituración de restos.