Los brotes verdes animan el área metropolitana
San Andrés desarrolla todo un sector de 29,7 hectáreas para viviendas y un supermercado, y Villaquilambre, Valverde y Sariegos siguen dando licencias
La construcción despega en San Andrés con el desarrollo de suelo en todo un sector, el SUNC-23. RAMIRO
Nadie sueña ya con las 3.000 viviendas que se llegaron a levantar anualmente en las puertas de la capital y que dieron un vuelco doblando los censos de San Andrés del Rabanedo, Villaquilambre, Sariegos y Valverde, pero los brotes verdes que empezaron a despuntar en 2019 y que aplastó la pandemia prosiguen en el alfoz. En San Andrés se plasman en el desarrollo de todo un sector de 29,7 hectáreas en Paraíso Cantinas, el denominado SUNC-23, situado entre la glorieta de Donantes de Sangre y el Lidl. Había tentado ya en 2015 a una cadena de supermercados que quería instalarse si salía adelante la tramitación urbanística para disponer de una parcela de 4.000 metros cuadrados y construir un establecimiento de 1.500 m2 con aparcamiento que se ha logrado desbloquear siete años después. La inversión alcanzará los 415.000 euros para ejecutar dos plantas de local y 81 plazas de estacionamiento. El nuevo dibujo urbano deja tres calles nuevas y más de 19.000 metros cuadrados para viviendas. En los dos años anteriores concedió doce licencias de unifamiliares y siete de reforma, una de ellas para un bloque de pisos.
En Valverde se han levantado en el último año una treintena de viviendas en pequeñas urbanizaciones de cuatro y cinco chalés. El edil de Urbanismo, Néstor Santos, reconoce que el municipio «sigue en la misma línea de crecer y de brotes verdes, pero con una alegría más contenida que en 2021-22 cuando primaba lograr una residencia al aire libre». También han notado que las reformas se han ralentizado en comparación con el bum que propició la post-pandemia, aunque el Ayuntamiento apuesta por el sector y por ofrecer «el mejor lugar para vivir» a los trabajadores del polígono de Villadangos.
El alcalde de Valverde, David Fernández, valora que el crecimiento que han obtenido hasta ahora «es muy importante y esperamos mantenerlo». Lo atribuye a «la calidad de vida» que ofrece el municipio, con numerosas «actividades culturales, sociales y deportivas», además de una vivienda «con precios asequibles».
El alfoz de León es el área más dinámica de la provincia y residencia del 40,6% de los leoneses. La construcción marcó el despegue del cinturón metropolitano desde los setenta en varias olas que tocaron puerto hace catorce años, pero que han vuelto a ir despertando de forma más tímida. Villaquilambre aprecia «el cambio de tendencia» que aportó dos decenas de solicitudes de licencia de obra mayor, que se suman a las dos de bloque de pisos para 50 viviendas del año pasado tras una larga sequía.
Y Sariegos también nota «un importante cambio» en materia de construcción por el gusto por regresar a los pueblos y por edificar «más de lo pensábamos». Algo que viene ligado a «los buenos servicios que tenemos».