León perdió un tercio de sus abejas entre los años 2008 y 2009
Europa inicia el proceso para prohibir el uso de pesticidas que dañan al insecto.
«No existen estudios que relacionen directamente la mortandad de las abejas con el uso de pesticidas que contienen neonicotinoides, sin embargo, es una de las principales causas de mortandad entre las abejas», explica el responsable de Miel Urzapa, Urbano González Escapa que añade que «una de cada tres abejas mueren en Europa por el uso de pesticidas en la agricultura, dato que se puede extrapolar perfectamente a León». Es más, el apicultor se atreve a poner fecha a la tragedia, conocida como síndrome de despoblamiento de las abejas: «Casi un tercio de las abejas de León murieron entre los años 2008 y 2009».
Esta es la razón por la que Urbano González se felicita por la decisión de la Comisión Europea (CE), que prohibirá el uso de pesticidas con neonicotinoides en Europa. La alta mortandad de las abejas no es sólo un problema para un sector «muy poco importante desde el punto de vista económico y, por tanto, sin capacidad de presión», asevera el apicultor cepedano. Se trata de un problema medioambiental que «ha llegado a la Comisión Europea, donde tienen datos suficientes como para prestar atención al problema».
Las tres plagas
González explica que el síndrome de despoblamiento de las colmenas, la pérdida de cabaña ganadera se debe a tres problemas, la nosemosis, descrita por primera vez por un equipo de investigación español, causada por un parásito unicelular; la varroa, un ácaro que se aprovecha de la abeja y que no se ha encontrado la forma de erradicar desde que hace 25 años llegó de Asia, y el uso de pesticidas.
La Comisión Europea anunció la semana pasada que proseguirá con su plan de prohibir el uso de tres pesticidas neonicotinoides que contribuyen al declive de las colonias de abejas, consideradas vitales para el ecosistema, tras respaldar su propuesta una mayoría de países comunitarios, según informó EFE.
Expertos de los Estados miembros se pronunciaron sobre la propuesta de Bruselas y no alcanzaron una mayoría cualificada a favor o en contra de la iniciativa, de manera que en ausencia de acuerdo corresponde a la CE decidir sobre la adopción de la restricción propuesta. En total, quince Estados miembros votaron a favor, dos más que en una votación precedente en marzo: España, Alemania, Francia, Bélgica, Bulgaria, Dinamarca, Estonia, Chipre, Letonia, Luxemburgo, Eslovenia, Malta, Holanda, Polonia y Suecia, indicaron fuentes comunitarias. En contra se mostraron ocho países: Reino Unido, Italia, Portugal, República Checa, Austria, Hungría, Rumanía y Eslovaquia. «Aunque ahora una mayoría de Estados miembros apoya la propuesta, la mayoría cualificada necesaria no se ha conseguido. La decisión ahora corresponde a la Comisión», indicó el comisario europeo de Sanidad, Tonio Borg.
Borg recalcó que, «dado que nuestra propuesta se basa en diversos riesgos para la salud de las abejas identificados por la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, por sus siglas en inglés), la Comisión seguirá adelante con su texto en las próximas semanas». El comisario recordó que las abejas son «vitales para nuestro ecosistema» al favorecer la polinización, y que su contribución anual a la agricultura europea se cifra en más de 22.000 millones de euros.
Según una información que recogía ayer EFE, el descenso del 31% de las abejas (un total de 800.000) en el pasado invierno pone en riesgo parte de las cosechas que requieren de las abejas para su polinización.
El Departamento de Agricultura estadounidense alerta que «actualmente, la supervivencia de las colonias de abejas es demasiado baja para asegurar nuestra capacidad para hacer frente a las demandas de polinización de las cosechas agrícolas de EE.UU».