Un derrumbe bloquea de nuevo el traslado de la pizarra

Hace años hubo problemas en el túnel de la Barosa , en la N-120 que enlaza el Bierzo con Valdeorras, fue cerrado y el tráfico se desvió por Puente de Domingo Flórez , por la N-536, salvando así la Nacional 120. Ahora lo que se ha hundido es la N-536 en la zona de Sobradelo de Valdeorras y todos los camiones cargados de pizarra que salen de las canteras de Casaio o la Baña por el alto de Trevinca hacia el Barco de Valdeorras, tienen que hacerlo por Puente de Domingo Flórez y salir a la N-120 por la Barosa, en el municipio de Carucedo.

Sucedía el pasado viernes. Una parte del vial se agrietó y se hundía en el término de Candís, muy cerca de la central hidroeléctrica de Iberdrola, en Sobradelo. Por ese vial, por la N-536 (la que parte de Ponferrada por Priaranza, Borrenes, Carucedo y Puente hacia Valdeorras) se mueven a diario más de 200 camiones, que llevan o sacar material de las canteras de pizarra, donde trabajan más de 2000 personas.

La carretera tiene el mismo trazado del siglo XIX y hace unos años comenzaron las obras para construir una circunvalación que saque los camiones de pizarra del casco urbano del Barco de Valdeorras. Para ello se está construyendo un túnel que atraviesa la montaña del Serro para enlazar la N-536 con la N-120. Las obras han estado paralizadas años y en las últimas semanas habían comenzado a retomarse los trabajos.

Las máquinas volvieron a ponerse a operar en esta zona donde el pasado viernes se hundía la carretera N-536 en Sobradelo. El relleno de un muro de contención cedió, el agua de lluvia ablandó todo y el paso de los camiones hizo el resto para que la carretera se convirtiera en completamente intransitable.

El asunto ha sido tan grave que los responsables de Carreteras del Estado han ordenado el trabajo inmediato para recuperar la normalidad. La previsión es que hoy lunes se retome la normalidad al quedar ya abierto el sábado un carril de paso, pero afecta a las cargas pesadas.