La pera de Lérida desata una tormenta y la Junta se agarra a la ley
El portavoz autonómico tira del principio de la libre concurrencia de los contratos públicos
La adjudicación del suministro de pera a los colegios de Castilla y León —inscritos en el programa escolar de promoción del consumo de frutas, hortalizas y leche— a una empresa de Granada que compra el producto en Lérida ha desatado una tormenta en el Bierzo (zona productora de Pera Conferencia por excelencia) después de la denuncia realizada por la Asociación Berciana de Agricultores. La decisión de la Consejería de Agricultura y Ganadería rompe una relación de años, ya que las cooperativas de fruta bercianas que ofertaban en el proceso de licitación siempre habían participado en esta campaña escolar, y contradice los compromisos que siempre ha mantenido la Junta de Castilla y León con el campo berciano. Una administración que ayer se agarró a la Ley de Contratos de las Administraciones Públicas para explicar que la adjudicación se haya hecho a una empresa de fuera.
Fue el portavoz de la Junta, Carlos Fernández Carriedo, el encargado de tratar de explicar el asunto en la comparecencia pública ante los medios de comunicación tras el Consejo de Gobierno. Aseguró que en base a la citada legislación, «no se puede impedir que se presenten empresas de otros lugares de España o, incluso, de la Unión Europea» y que las ofertas presentadas son valoradas por una mesa de contratación que elige la opción más ventajosa desde un punto de vista económico. Esa Ley de Contratos —prosiguió el portavoz autonómico— no permite excluir o beneficiar a empresas por el simple hecho de donde tengan registrada su sede social.
Pero lo que los agricultores bercianos piden no es que se incumpla la ley en ningún caso, sino que se modifiquen los pliegos de licitación de las ofertas de este tipo para dar prioridad a las empresas de Castilla y León. Eso sí se puede hacer, defendió ayer el presidente de la Asociación Berciana de Agricultores, Daniel Franco, que no sale de su asombro tras la adjudicación del suministro de pera. «No dudamos de la legalidad del contrato, pero lo que queremos es que se tenga en cuenta el producto de proximidad y no el precio de los productos que, además, no llegan en las óptimas condiciones que tienen que llegar», afirmó. «Qué mínimo que los contratos se queden en empresas de Castilla y León. Ya no hablo solo del Bierzo, sino de la comunidad», dijo también.
El presidente de la ABA aseguró que los agricultores de la comarca ya «están hartos de idas y venidas, de muchas promesas y pocos hechos». También él informó que en el caso de la manzana, sí que ha resultado adjudicataria una de las cooperativas bercianas que presentó oferta.
Un estafa a los agricultores
La primera formación política en reaccionar a la adjudicación del suministro de pera a los comedores escolares a una empresa de otra punta del país fue Coalición por el Bierzo (CB), que lo calificó de «estafa a los agricultores y a sus esperanzas de una gestión justa con nuestros productos de calidad».
«Es necesario que el consejero dé explicaciones de manera inmediata y no en las Cortes de Castilla y León. Tiene que venir a dárnosla directamente aquí, al Bierzo, a nuestros agricultores. En las Cortes no sirven de nada las explicaciones a una oposición que está a otra cosa», criticó el secretario general de la formación bercianista, que culpó también al resto de partidos representados en las Cortes. «¿Dónde estaban esos procuradores tan bercianos cuando se adjudicó esta compra? Ha tenido que ser la Asociación Berciana de Agricultores la que destape esta nueva estafa que nos hacen desde Castilla y León. No les importamos lo más mínimo», denunció Alonso.
Dichos no hechos
Quien sí habló fue el procurador berciano de la Unión del Pueblo Leonés (UPL) en las Cortes de Castilla y León, José Ramón García, que consideró la decisión de la Consejería de Agricultura y Ganadería «inexplicable» y «en contra de lo que muchas veces tenemos que escuchar sobre la apuesta por el producto de cercanía, el mundo rural e incluso la España Vaciada», dijo, recordando que, no hace mucho, a los representantes de la Junta de Castilla y León se les «llenaba la boca prometiendo un parque agroalimentario en el Bierzo que luego se llevan a otro lugar».
«Muchas promesas, pero los hechos demuestran la forma de gestión real», afirmó García, que también pidió explicaciones por «una decisión que nadie puede entender, pues los hechos contradicen, lamentablemente una vez más, las palabras».