La presión del viento desaloja San Adrián y Ferradillo y arde la ermita de la Aquiana
Las llamas siguen activas por Paradaseca, Fuente de Oliva, Montes de Valdueza, Finolledo, Vega de Yeres y Viloria
Los bandazos del viento del sur, que transporta verdaderas bolas de calor y fuego a altas temperaturas —en valles muy encajonados, cargados de vegetación y masa arbórea— están poniendo muy difícil las labores de extinción a las brigadas forestales, que desde el aire y desde tierra, con la Ume desplazada, tratan de aplacar los 6 incendios forestales que al cierre de esta información permanecían activos en el Bierzo.
De la pasada jornada, lo más destacado fue el desalojo de la veintena de vecinos del pueblo de San Adrián de Valdueza (Ponferrada), en el que a diario viven una docena de personas, pero que el fin de semana atrajo a más porque celebraban sus fiestas patronales. También la aldea de Ferradillo (Priaranza), que ha sido rehabitada.
A primera hora de la mañana, después de que el fuego se descontrolase por las laderas de las montañas verticales, rocosas y con masa arbórea de la falda norte de los Aquilianos, la Junta declaró el nivel 2 de alerta y la Guardia Civil y la policía sacaron de allí a los vecinos. Salieron sin problemas en sus coches y la totalidad de ellos cuentan con primera residencia en Ponferrada, en barrios como el de Flores del Sil. De esta forma, las autoridades no tuvieron que buscarles realojo. Allí dejaron gallinas y conejos con comida para varios días. Un ganadero tuvo que sacar de la zona a una treintena de vacas y conducirlas hacia Montes de Valdueza.
Llamativo también fue que las llamas se enriscaran ladera arriba por el monte bajo de vegetación —extremadamente seco— y llegase después de quemar pinares a la ermita de la Aquiana, a 1.800 metros. Según confirmó el edil de Medio Rural, Iván Alonso, afectó a la techumbre.
Por lo demás, el fuego permaneció activo por otros costados del Bierzo, como la zona norte y oeste de la comarca. En Fuente de Oliva (Balboa) las máquinas boldozer abrieron largos y anchos cortafuegos, que permitieron mantener por momentos a raya el incendio. Activo también está por la zona de Paradaseca (Villafranca), donde se calcula que son muchas las hectáreas de monte arrasadas. Las llamas también castigaron a montes de las Vega de Yeres (Puente de Domingo Flórez), Finolledo (Cubillos) y Viloria (Castropodame).