La Zona de Bajas Emisiones de Ponferrada cuenta ya con todas las cámaras de control

El Ayuntamiento de Ponferrada ha completado la instalación de las cámaras de control de acceso a la Zona de Bajas Emisiones , que afecta a la zona delimitada por las avenidas del Castillo, de la libertad y la Puebla, entre Lazúrtegui y la avenida Huertas del Sacramento y la parte del mercado de abastos. La ZBE, siglas que se convertirán en recurrentes en los próximos meses, estará delimitada también por señales físicas verticales en todo el perímetro de acceso, cuya colocación todavía no se ha iniciado, pero que la DGT ya tiene aprobada desde hace un año.

Además, en los próximos meses se implantará un sistema de señalización compuesto por 10 pantallas de gran tamaño que, conectadas a los diferentes sistemas de la ZBE, ofrecerán, una vez que se ponga en funcionamiento, información sobre restricciones, parámetros de calidad del aire, plazas de aparcamiento libres clasificadas por calles, plazas libres en los parkings públicos y mensajes relacionados con la movilidad.

Las cámaras son de última generación. Se trata de un sistema de reconocimiento automático de matrículas y un sistema de comprobación de los distintivos ambientales y la categoría de homologación de los vehículos en los 24 puntos de acceso a la zona. Una medida polémica ya que en algunas ciudades se está pidiendo también que controlen si el vehículo ha pasado la ITV.

Además, se instalarán sensores en todas las plazas de estacionamiento de la ZBE (690 plazas). Esto permitirá, según fuentes municipales, conocer en tiempo real las plazas libres y reducir el tráfico de agitación (vehículos en busca de estacionamiento) y, por consiguiente, las emisiones de contaminantes, según el Ayuntamiento. También se instalarán sensores para las plazas reservadas a personas con movilidad reducida y para las de carga y descarga.

Con carácter general no tienen ninguna limitación para acceder y circular dentro de la ZBE los vehículos con distintivo de cero emisiones, distintivo eco y C.

También podrán acceder y circular ilimitadamente los vehículos de las personas residentes y propietarios dentro de la ZBE, los propietarios de negocios y trabajadores, los usuarios de garajes sitos en la ZBE, los vehículos que acudan a los parkings municipales,(Compostilla y Pérez Colino), los declarados como propiedad de titulares de tarjetas o de personas autorizados para el desplazamiento de personas con movilidad reducida, los servicios públicos de emergencia, los de servicios públicos municipales, taxis transporte de viajeros, empresas de reparto a domicilio y clientes de establecimientos hoteleros .

Los vehículos de mudanzas, las grúas para remolque de vehículos y auxilio en vía pública, los vehículos para el transporte de dinero y valores, los vehículos de autoescuelas ubicadas en la ZBE, los proveedores de negocios, las empresas de construcción y cualquiera que requiera actuar dentro de la zona delimitada, podrán acceder previa habilitación en el sistema de gestión que facilitará el ayuntamiento.

El resto de vehículos inscritos en el padrón de vehículos de Ponferrada tendrán un número de accesos anuales en función de su distintivo ambiental en función de los criterios a desarrollar en la ordenanza.

La ordenanza aún no se ha aprobado en el Ayuntamiento de Ponferrada ya que el equipo de Olegario Ramón no cuenta con los apoyos suficientes. Ni siquiera entre sus socios de gobierno. Coalición por el Bierzo se desmarcó en la campaña y la oposición de PP también rechaza la medida, igual que otros partidos.

Entrar con un vehículo no autorizado a la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) conllevará una multa de 200 euros, según la propuesta de la Federación Española de Municipios y Provincias, que ha realizado una ordenanza tipo para todos los ayuntamientos de España.

La principal queja no es que se tenga que hacer, por ser Ponferrada una ciudad de más de 50.000 habitantes, sino por el hecho de plantearse en una zona que arrastra una crisis comercial y está a un kilómetro del centro comercial de El Rosal.