Casi un millar de personas cobran en la provincia por cuidar a sus familiares dependientes
La provincia de León se sitúa a la cabeza de la Comunidad con 928 personas integradas en el Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia (SAAD) para dedicarse en exclusiva a sus familiares frente a las 737 de un año antes.
Un total de 4.015 cuidadores no profesionales de personas dependientes en Castilla y León -696 más que hace un año- se han incorporado como cotizantes hasta el 31 de julio de 2021, según los datos de la Tesorería General de la Seguridad Social recabados por el Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso).
La mayoría son nuevos convenios suscritos desde que el 1 de abril de 2019 la Administración General del Estado se hizo cargo de abonar las cotizaciones, en cumplimiento del Real Decreto-ley 6/2019, de 1 de marzo, de medidas urgentes para garantía de la igualdad de trato y de oportunidades entre mujeres y hombres en el empleo y la ocupación.
Cuidadores
Castilla y León contabiliza un total de 4.015 asistentes no profesionales
En cuanto a la edad, el 38,2 por ciento no ha cumplido los 50 años, un 42,5 por ciento tiene entre 50 y 60 años y un 19,3 por ciento supera los sesenta.
Uno de los motivos de la aprobación de la prestación económica destinada al cuidador no profesional en el marco de la Ley de Dependencia era saldar en la medida de lo posible una deuda histórica especialmente contraída con las mujeres que asisten a sus mayores (y a veces pequeños y jóvenes con discapacidad) renunciando en muchos casos a su vida laboral y social.
La posibilidad de cotizar por la asistencia a personas en situación de dependencia entró en vigor en mayo de 2007, con la crisis económica entrando en escena.
Cotización asistencia
La ley que posibilita la remuneración económica entró en vigor en mayo de 2007 con la crisis
El alta en el sistema de la Seguridad Social permitió a los cuidadores informales alcanzar las mismas prestaciones que el resto de trabajadores, como por ejemplo, la jubilación o la incapacidad permanente. Asimismo, les abrió las puertas a programas de formación para que pudieran desempeñar su labor del mejor modo posible, así como prevenir los efectos negativos y estresantes que implica su figura.
El sistema de dependencia en Castilla y León atiende a cerca de 106.388 personas, que reciben 142.998 prestaciones. De ellas, 30.135 son prestaciones económicas para el cuidado en el entorno familiar; 8.213 están encuadradas en atención residencial; 22.194 responden a ayuda a domicilio, y 15.076 se enmarcan en teleasistencia. Finalmente, 7.640 se prestan en centros de día o de noche; 12.985 se centran en programas de prevención de la dependencia y promoción de la autonomía; 45.236 son económicas y aparecen vinculadas al servicio; y 1.519 se revelan una ayuda para hacer frente al pago de un asistente personal