Tres órganos sonarán a un mismo tiempo en la Catedral

Jesús Ángel Rodríguez Recio, a caballo entre Oviedo y Ávila, donde es profesor del Conservatorio, tiene León como referencia vital y Crémenes en su totalidad. Por eso, que surja ahora lo que será el gran momento del domingo cuando estrene Lux es solo la culminación de tantos vínculos que pese a la distancia se mantienen en toda su intensidad. Como compositor de altura, lo que contiene Lux y el cómo se hizo sólo está al alcance de los privilegiados aunque él lo cuente con sorprendente naturalidad y normalidad. De hecho, va al grano: «La obra está escrita para tres órganos porque el órgano de la Catedral tiene esa posibilidad. Incluso, creo que hasta nueve podrían estar sonando a la vez conectados al principal y desde diferentes lugares de la Catedral», explica. Así, lo que para los demás resulta inabarcable, para él tiene hasta ese aliciente a la hora de componer.

«No suele haber obras así, porque lo que se ha hecho han sido arreglos para que sean tocados», incluso añade para acercar lo que se trata de una obra original cuyo estreno absoluto tendrá lugar este domingo en la Catedral, y que será interpretado por tres organistas: los titulares de las Catedrales de León, Ávila y Málaga.

Será grandioso. Pero no tanto como charlar con el protagonista, Jesús Ángel Rodríguez Recio, un aún joven profesional de la música que es pianista, compositor y docente y que no se decanta por ninguna de las tres actividades como favoritas porque a las tres le saca partido. «Y con el tiempo, más. Cuando dicen eso de que de los alumnos se aprende yo ahora descubro que es verdad», asegura.

Para componer Lux , al margen de lo musical, Rodríguez Recio llevó a cabo un interesante trabajo de observación y estudio sobre la Catedral y sus vidrieras. Sobre esa luz que varía en función del día y su ubicación con respecto al Sol. Así le salió una obra que es un solo movimiento pero con siete secciones en las que de alguna manera la música se hace visible en un recorrido similar al que hacen los peregrinos cuando entran en la Catedral por la puerta principal, y así comienzan por el rosetón norte.

Pero junto a esta inspiración artística, el músico leonés incluye un apartado que humaniza todo, desde la admiración a lo familiar.

Y es que Lux se inspira en las vidrieras de la Catedral de León. Pero también en las fotografías que hiciera Manuel Martín Martínez (1933-2021), siendo un homenaje al citado fotógrafo leonés. De igual forma, la pieza está dedicada a la memoria del abuelo del compositor, el vecino de Crémenes Ángel Recio Fernández (Lucho), quien falleciera recientemente. «Mientras componía Lux mi abuelo ya estaba enfermo. Su recuerdo me venía continuamente. Tal vez ese lado espiritual que tiene la composición hacía que me acordara de él», explica.

Las vidrieras que aparecen representadas musicalmente lo hacen en el siguiente orden: rosetón norte, vidriera de La Cacería, el árbol de Jessé, Simón El Mago, rosetón sur, vidriera de La Virgen del Camino y rosetón occidental; siguiendo así el ciclo vital del sol, desde su nacimiento hasta su ocaso. Para ilustrar estas representaciones son citadas en la composición algunas músicas pretéritas: los cantos gregorianos Lux Eterna y Salve Regina, la cantiga Santa Maria strela do dia de Alfonso X El Sabio y la célebre canción popular de La Sobarriba Botones de arriba abajo .

‘Duelo de órganos’. primera vez

De esta forma, el domingo a las 20.00 horas, y dentro del tercer Ciclo Internacional de Órgano, tendrá lugar este estreno absoluto de Lux . Si ya de por sí esta novedad lo convierte en máximo acontecimiento cultural leonés gracias a Rodríguez Recio, también lo será lo que se presenta como Duelo de órganos . La cita reunirá en el primer templo diocesano a los organistas de las catedrales de Ávila, Málaga y León, quienes se batirán en duelo musical con obras para tres órganos, además de con esta Lux de color leonés. Este será un concierto muy especial porque también conmemora el décimo aniversario del gran órgano Klais que se instaló en 2013. El órgano cuenta con ocho teclados portátiles que pueden ser tocados a la vez. En definitiva, un gran día con el nombre propio de Jesús Ángel Rodríguez Recio y Lux , la música que brilla en las vidrieras.