Elon Musk lanza una oferta hostil para hacerse con Twitter por 40.000 millones
El fundador de Tesla amenaza con irse de la empresa si el acuerdo que busca fracasa
El multimillonario empresario Elon Musk da el paso definitivo para hacerse con el control de la red social que en los últimos tiempos se ha convertido en un auténtico escaparate publicitario —y gratuito— para sus empresas.
El fundador de Tesla y de Space X sorprendió ayer al mercado al lanzar una oferta hostil sobre Twitter por 43.000 millones de dólares (unos 39.640 millones de euros), disparando la cotización de la firma del pájaro azul un 12% en la preapertura de Wall Street, aunque al cierre de los mercados europeos los números rojos se imponían en el valor.
El hombre más rico del mundo, con una fortuna estimada de 219.000 millones de dólares, ha ofrecido 54,20 dólares en efectivo por cada acción de Twitter. Ello implicaría una prima del 18% respecto a la cotización del cierre del miércoles de la red social y de más del 54% frente al precio al que compró sus primeras acciones de la compañía el pasado 28 de enero.
«Invertí en Twitter porque creo en su potencial para ser una plataforma para la libertad de expresión en todo el mundo (...) pero necesita ser transformada», explica el empresario en el comunicado oficial remitido este jueves a la SEC, el supervisor bursátil estadounidense.
El movimiento se habría estado gestando desde hace meses, pero ha pillado por sorpresa a los inversores y también a la junta directiva de Twitter, a la que Musk ha querido mandar un contundente mensaje para dejar claras sus intenciones. «Se trata de mi mejor y última oferta», asegura. Es decir, si no se acepta no subirá el precio. Y advierte en todo caso de que también necesitará «reconsiderar» su posición como accionista de Twitter. Este aviso de salida de la firma bien podría ser interpretado como una amenaza. Y es que los accionistas de la red social han visto como su inversión se ha revalorizado con fuerza desde que Musk comenzó a comprar títulos de la compañía, Twitter necesita transformarse en una empresa no cotizada», insiste Musk. Excluir de Bolsa a la red social evitaría al magnate pasar por los estrictos controles ejercidos por la SEC sobre las empresas cotizadas.