Entrevista al alcalde de Ponferrada: «Espero que la oposición de Ramón sea leal y constructiva»
-Marco Morala da su primera entrevista como nuevo regidor de Ponferrada tras hacerse con la Alcaldía gracias a los apoyos de CB y Vox
A primera hora de la tarde, Marco Morala concedió ayer la primera entrevista como alcalde a Diario de León. Sus promesas son ya iniciativas sobre las que «trabajar, trabajar y trabajar». Y una palabra: Ponferrada
—¿De quien se ha acordado especialmente el día de su proclamación como alcalde?
— Pues he hecho una vuelta al pasado; a mi infancia en el barrio de San Andrés donde nací.Me he acordado de mucha gente que han sido parte de mi vida durante estos 52 años, gente que está y gente que no está, pero sobre todo de gente que quería a Ponferrada. He hecho mención especial a un alcalde, Isidro Rueda, que fue también mayordomo de la cofradía de Jesús Nazareno, que ha sido para mí el mejor alcalde de la historia.
— ¿Cuál va a ser su primera medida como alcalde?
—Vamos a empezar a trabajar para llevar la Cena Templaria al interior del Castillo. También tenemos que preparar ese pleno de organización. Lo queremos convocar cuanto antes para poner a funcionar la maquinaria del Ayuntamiento lo antes posible, tanto en las distintas áreas como ese programa de gobierno que hemos acordado para estos cuatro años. También tenemos que empezar a trabajar con las administraciones superiores y, en ese sentido, tenemos que empezar a viajar a Valladolid para traer a Ponferrada las inversiones que se nos deben, y que así se han comprometido. Los plazos administrativos son los que son y cuanto antes empecemos, antes conseguiremos que esas inversiones reales lleguen a Ponferrada.
— 22 millones de euros es un compromiso muy alto.
— Es una valoración que se ha hecho; hay que estar pendientes también de la valoración de los técnicos, pero desde luego aún faltan determinadas inversiones que forman parte de nuestro programa electoral. Esperemos que se traduzca en realidades y que tengan un lugar en el presupuesto de la Comunidad autónoma.
—Decía antes que va a llevar la Cena Templaria al Castillo. ¿Es posible?
—Vamos a trabajar en ello, porque el tiempo se nos echa encima. Vamos a intentarlo por todos los medios. Ese atractivo turístico que es tener una cena en el interior de una fortaleza medieval no lo podemos desaprovechar. Estaríamos perjudicando lo que es la propia Noche Templaria y su factor de atracción para los turistas.
—¿Quién va a ser el primer teniente de alcalde?
—Va a ser Iván Alonso; segundo, Lidia Coca; tercero, Roberto Mendo; cuarto, David Pacios y quinto, Luis Antonio Moreno.
—Dice que lo primero es viajar a Valladolid, ¿ya ha concertado alguna entrevista con el presidente de la Junta?
—Ha sido desde el primer momento un contacto muy fluído. Hemos conversado estos días largo y tendido; también con el consejero Juan Carlos Suárez-Quiñones. Y lo mismo he hecho, telefónicamente, con Carlos Fernández Carriedo. Es un trabajo que se va a intensificar. Vamos a hacer una programación y, desde luego, insisto, la intención y la voluntad es empezar desde ya en estas inversiones que van a venir de la mano de la Junta de Castilla y León.
—¿Qué le ha parecido el tono y la actitud de Olegario Ramón en el Pleno?
—Yo comprendo , desde el punto de vista humano, que es un momento y una situación difícil, realmente complicada de asumir, pero tanto en el salón de plenos como en la calle se ha notado esa alegría, esa esperanza, esas expectativas que estamos generando de cambio en Ponferrada. La gente está realmente ilusionada, motivada, todo son mensajes de ánimo, y tenemos que aprovechar ese estado de ánimo generalizado para plasmarlo en realidades. Trabajar para esas tres grandes líneas de actuación, que son recuperar la actividad económica, recuperación del empleo y recuperación de la población en Ponferrada. Respecto a Olegario Ramón, ahora ocupa el lugar de jefe de la oposición y entiendo que sea una oposición leal y constructiva con este equipo de gobierno.
—¿Pero no cree que, a la vista de lo dicho en las últimas horas, va a ser más bien una oposición dura? También por la presencia de Vox.
—Entiendo que el grado de exigencia de Olegario Ramón como jefe de la oposición hacia este alcalde será el mismo que él se autoimpuso cuando ejercía la Alcaldía. No creo que esté en disposición de exigir a los demás lo que no ha sido capaz de desarrollar en Ponferrada. Y en cuanto a Vox, hay que respetar a los ponferradinos. El voto de todos los ponferradinos es igual. Ha sido libre, legítimo y voluntario. Los ponferradinos han optado por distintas opciones políticas que son legítimas, legales y democráticas, con lo cual no podemos distinguir entre unos ponferradinos y otros. No es mejor un voto que otro. El voto al Partido Popular, al PSOE, a Coalición o Vox tiene el mismo valor y es merecedor del mismo respeto. En ese sentido, y respetando el derecho de la oposición y la libertad legítima de expresión, hay que decir también que las urnas se han pronunciado. Los ponferradinos se han pronunciado; han decidido que seamos cuatro las opciones políticas las que conformemos la Corporación y, a partir de ahí, trabajar, trabajar y trabajar por el futuro de Ponferrada y que no nos despiste ninguna otra cuestión accesoria, poco útiles para atender las necesidades reales de Ponferrada.
—¿Se le va a dar medios a la oposición, o va a hacer como en el mandato de Olegario Ramón, que tuvieron que reclamarlos en los tribunales?
—Yo garantizo que a mí no se me va a condenar por vulnerar ningún derecho fundamental de la oposición. Los términos que marca esa sentencia son los que se van a aplicar desde esta Alcaldía y este equipo de gobierno.
—¿Cómo va a afrontar la ‘patata caliente’ de la actual Zona de Bajas Emisiones? ¿Qué medidas se va a poner en marcha?
—Pues las anunciadas durante toda la campaña. Todos estamos conformes y se ha incluido en el programa de gobierno. En primer lugar, acordar una moratoria en la entrada en vigor, mínimo hasta 2026. Y a partir de ahí, sentarnos con vecinos, operadores económicos, sindicatos, taxistas, comerciantes, autónomos... y desde el diálogo consensuar dónde implementar esa zona de bajas emisiones, qué nivel de restricciones, limitaciones a la movilidad la extensión de la misma. Y lo vamos a hacer todo conjuntamente desde el primer momento.
—¿Puede ser que no sea la misma zona?
—Puede serlo. Tenemos que analizar el expediente, que se nos ha sido vetado por el anterior equipo de gobierno municipal, y una vez estudiado, tomaremos las decisiones consensuadas y dialogadas que busquen un beneficio real para Ponferrada. Desde luego que no perjudique a sus comerciantes, hosteleros...
—¿Alguna vez pensó que el pacto con CB se podía romper?
— Los pactos, en política, tienen su camino y sus tiempos. El programa de gobierno con CB coincide en más del 90% y ahí tuvimos claro que hay ilusión y que nos complementamos perfectamente cuando se antepone Ponferrada a las siglas y las inversiones reales a cualquier otro tipo de disquisiciones o vanas promesas. En ningún momento hubo un momento de tensión para que se pusiera en duda.