Educación
Las clases de refuerzo seguirán pese a no haber exámenes de recuperación
La consejería mantiene el programa de junio y julio, tras el cambio hecho por el Gobierno
Este año no habrá exámenes de recuperación. Después de que el Gobierno aprobase un nuevo marco normativo para la evaluación, la promoción y la titulación de los alumnos las comunidades educativas deben adaptarse al nuevo desarrollo y cambiar su currículo de cara a final de curso. La consejera de Educación de Castilla y León, Rocío Lucas, ya ha avanzado que comenzará a trabajar sobre ello antes de Navidad, pero no sin criticar el cambio de modelo una vez iniciado el curso. Desde la consejería, además, concretan, que a pesar de que este año no habrá exámenes de recuperación —que en la Comunidad se adelantaron de septiembre a julio ya desde 2017— se mantendrán las clases de refuerzo durante los meses de junio y julio, que hasta ahora servía a los estudiantes para reforzar contenidos y enfrentarse a las pruebas extraordinarias para conseguir superar la asignatura.
Bachillerato con una
El decreto a nivel nacional permite a los estudiantes conseguir el título de la ESO sin límite de suspensos y en Bachillerato sin tener una materia aprobada, lo que resta validez a las clases de refuerzo que desde el curso 2017-2018 ofrece la consejería. El programa de refuerzo es voluntario y lo recomiendan los profesores a los alumnos que consideran precisan acompañamiento para consolidar los contenidos académicos. Ahora, pese a que este programa quedará devaluado ante la falta de un examen al que deban enfrentarse los alumnos, la Consejería de Educación seguirá ofertándolo.
La Consejería de Educación incide en que el cambio de criterio del ministerio de Alegría obligará a «modificar y adaptar las programaciones didácticas para seguir dando la oportunidad de evaluar a los alumnos». Así, indican que se adaptarán las programaciones para que las pruebas finales de cuarto de ESO se hagan en junio, un camino en el que comenzarán a trabajar antes de Navidad, como concretó la propia Rocío Lucas.
Afianzar contenidos
Durante la última reunión de la comisión sectorial de Educación, en la que participan responsables del ministerio con los representantes de las comunidades autónomas, Rocío Lucas insistió en su «malestar» por el cambio de las reglas a mitad del partido con la publicación del real decreto, tras recordar que Pilar Alegría había avanzado en una reunión previa que iba a haber una disposición transitoria para este curso respecto de las pruebas extraordinarias de evaluación de ESO y «se ha eliminado esa posibilidad con la excusa de que lo exige el Consejo de Estado, cuyo informe no es vinculante».
«Es curioso que de primer a segundo curso de ESO se pueda pasar con un tope de suspensos (dos) mientras que en el cuarto y último, el de la titulación, no exista ese límite», ya había dicho la consejera de Educación, quien también consideró que el decreto sobre evaluación, promoción y titulación pretende ocultar la tasa de fracaso escolar «en vez de mejorar la calidad de la enseñanza».