La dimisión del presidente de Renfe deja en el aire su plan de poner el AVE ‘low cost’ a León

Antes de dejar su cargo como presidente de Renfe, el presidente de la compañía tuvo tiempo de certificar que el próximo objetivo del operador es llevar el Avlo a todos y cada uno de los destinos de la alta velocidad.

Así sabe León que dispondrá de conexiones con esta rama de bajo coste, que permite incrementar la oferta, diversificarla, en un servicio que cada día tiene más demanda, y que es uno de los exponentes de comunicación más notables de los que dispone la capital leonesa.

Avlo para todos es la ocasión que espera la demanda en León, donde se advierte ya un cierto descontento entre los usuarios por la cuantía de los precios de los billetes en AVE o por otro trayecto de la vía de alta velocidad, sin disponer de la alternativa de la competencia, que sí disfrutan en plazas en las que operan las compañías privadas, que ha contribuido a reducir los costes para los viajeros por la simple inercia del incremento de la oferta que realizan Iryo, Ouigo o la filial de Renfe, con su marca de low cost, movilizada como recurso desde que entró en vigor la normativa de la liberalización de viajeros.

La necesidad de la fórmula Avlo en León viene avalada también por una tabla de tarifas que contrastan con precios más aliviados en otros enclaves de líneas beneficiadas por el efecto de la competencia privada; ese agravio en el coste de los billetes tampoco se enjuga por la nueva táctica de bonificar los trayectos a los usuarios, en su totalidad, o de forma porcentual, a través de bonos y planes de descuentos por tramos.

León pide a gritos un tren Avlo que tire hacia abajo de la media de los precios de los billetes por llegar hasta la capital de España a través de la vía de alta velocidad; la comparación resulta abismal, también sin que entre en circulación el tren morado que distingue la oferta de bajo coste de Renfe, allá donde opera.

Marcada la certeza de que León llegará a tener Avlo a corto o medio plazo, lo que no dejó claro el hasta ahora presidente de la compañía pública es el calendario de despliegue de estas unidades; lo que será posible y acompasado con el material suficiente para cubrir los trayectos.

El tren que cubrirá las conexiones desde todas las paradas , para incentivar el uso del ferrocarril entre los usuarios que habitualmente viajes por carretera, según declaró el propio Isaías Táboas la pasada semana en una conferencia ante ejecutivos y directivos de empresas.

En esa misma intervención, el ya ex directivo de Renfe, descubrió algunas otras novedades tácticas en el reparto de material a los diferentes destino que opera la compañía ferroviaria.

La prioridad de destino de los Avril en la oferta Avlo en la línea de Madrid a Barcelona está justificada por el sistema de control de la vía a Sevilla, que dispone del LZB, en vez del ERTMS que se aplica en el resto de conexiones de la red de alta velocidad; así que el modelo del 112 carrozado según las condiciones de confortabilidad que aplica Avlo pasará a la conexión sur y serán relevado en la línea de Barcelona por los 106 en cuanto Renfe disponga de esas unidades nuevas de Talgo.

El servicio de bajo coste que incluye el Avlo, junto a Ouigo e Iryo, reúnen la mitad de usuarios de servicio de viajeros de alta velocidad vinculados a los trenes AVE.

Las novedades en el plan estratégico de Renfe derivadas de las consecuencias de la inflación han obligado a repensar parte del plan estratégico de la compañía fijado en el paréntesis de una década, aplicado desde 2018 y en vigor hasta 2028.

Entre otras cosas, porque el operador público tiene que amoldar sus objetivos a la liberalización de las obligaciones de servicio público, en las que ya empiezan a pujar fuerte las empresas privadas que tienen actividad en la red española.

Ese es otro frente con flecos sueltos en la capital leonesa.