Los sectores del emprendimiento
El empleo autónomo se convierte en refugio de actividad: huye del campo y vuelve al comercio
La pandemia no rompe la tendencia, el trabajo por cuenta propia se desploma en industria y crece en educación y sanidad
La pandemia ha sacudido con especial virulencia al sector servicios, y a los negocios más pequeños, mucho más vulnerables a los cierres y la retracción del consumo. La recuperación a trompicones de la actividad tras el confinamiento y los cierres de 2020 se traducen en el empleo por cuenta propia en la provincia en una evidencia: la crisis sanitaria no ha roto las principales tendencias que el emprendimiento individual mostraba antes de la llegada del covid. El comercio sigue siendo el sector refugio de los autónomos leoneses, mientras la segunda actividad en importancia por número de negocios, la agricultura, muestra una alarmante tendencia a la baja que ya se manifestaba anteriormente. Un dato llamativo si se tiene en cuenta que la agroindustria ha sido en teoría una de las actividades que más reforzadas ha salido del shock del virus.
Con una industria también en caída libre, sólo los profesionales que se refugian en la creación de sus propias iniciativas empresariales y quienes apuestan por esta modalidad en actividades relacionadas con la educación y la sanidad ofrecen en la provincia una expectativa optimista.
León sigue siendo la primera provincia de la autonomía en emprendimiento individual, y la crisis ha dado un respiro a la pérdida de efectivos por cuenta propia que vienen sumándose desde la recesión financiera. Pero la tendencia parece clara. La iniciativa local pierde fuerza, y se refugia mayoritariamente en actividades fuertemente dependientes de un consumo cada vez más volátil, según los datos de la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA). Un flanco débil que la crisis económica derivada de la pandemia no parece haber logrado transformar.
Caída y recuperación
El último ejercicio cerró en León con un crecimiento del número de autónomos: 183 más, hasta los 36.136. Un aumento que parece ser sobre todo el refugio del autoempleo, porque en algunos sectores básicos ha mantenido desde antes de la llegada del covid una alarmante tendencia a la baja.
El número de nuevos negocios por cuenta propia aumentó el año pasado, a pesar de las dificultades impuestas por las restricciones sanitarias y por el receso del consumo privado, en el sector del comercio. 158 nuevos negocios en la provincia, lo que suman 7.902 cotizantes en el Régimen de Trabajadores Autónomos, el grupo más numeroso de quienes se establecen por cuenta propia.
El año anterior, con las restricciones del covid, León perdió 244 comercios. Quizá no fue sólo por la pandemia, porque en 2019, antes de la llegada del virus y en pleno proceso de recuperación, la provincia había perdido sólo en un año otros 228 negocios del sector.
Más comercios
Es el sector de actividad en el que más autónomos iniciaron su andadura durante el año pasado
Cae la agricultura
Pierde trabajadores por cuenta propia desde antes de la pandemia, en 2021 de forma más acelerada
Hostelería
El tercer sector con más actividad en la provincia sigue perdiendo negocios, aunque en menor medida
El caso de la agricultura
Llamativo es el caso del sector agrícola. A pesar de ser uno de los que en teoría han tenido más importancia (y cifra de negocio) en la pandemia, y se han ubicado como estratégicos en la cadena de producción, en la provincia el descalabro de autónomos se mantiene con más fuerza que nunca.
Ya antes de la llegada del virus el abandono de la actividad agroganadera era evidente: en 2019 perdió 101 autónomos, y durante el año duro de la pandemia apenas 67. Pero sólo en el último ejercicio se han dado de baja 191 trabajadores por cuenta propia en el sector. Son, con todo, 6.570, el segundo grupo más potente entre los pequeños emprendedores de la provincia.
La hostelería, uno de los sectores más afectados por la cadena de restricciones, siguió el año pasado su tendencia a la desaparición de negocios, aunque de forma más contenida. Desde 2018 (antes del covid ya había perdido un centenar de establecimientos) suma casi 230 negocios menos, aunque sigue siendo una de las principales actividades por cuenta propia, y cerró el pasado ejercicio con 4.222 bares y restaurantes.
Una de las actividades en las que el emprendimiento por cuenta propia muestra indicadores más preocupantes en la provincia es la industria. Justo antes de la pandemia, en teoría en época de crecimiento, perdió sólo en 2019 416 autónomos. Se le suman otros casi 70 desde entonces, el año pasado no consiguió contener las pérdidas. Son 2.149 trabajadores por cuenta propia.
Los que crecen
Entre los sectores de actividad que consiguen crecer en el último año destaca el de los profesionales y quienes se dedican a actividades científicas, que sumó 61 iniciativas, hasta las 2.311 (casi un centenar más que antes de la crisis sanitaria).
La educación recibe también un impulso, y acoge a 760 autónomos; mientras las actividades sanitarias suman otras 40 en 2021, y reúnen a 1.128 trabajadores por cuenta propia.
En todo caso, la evolución de los sectores en los que los autónomos leoneses buscan desarrollar su actividad confirma la clara tendencia a la terciarización de la economía local, a pesar de las dificultades que el comercio y la hostelería han padecido en los últimos dos años. Preocupante el desplome de agricultura e industria.