La empresa defiende que fue un caso único y la sopa se cocinó ese día
Serunion aseguró ayer que tras recibir la información «sobre la aparición de cuerpos extraños en una sopa de fideos» de una usuaria del menú del personal de la cafetería del Hospital de León, se revisó todo el servicio y no se detectó ningún caso más, aunque se procedió a iniciar «una investigación más exhaustiva». Según la empresa de restauración, la sopa se había cocinado esa misma mañana cumpliendo los controles de seguridad alimentaria. También se inmovilizó la partida de fideos y se entregó al departamento de calidad el albarán del producto para que el proveedor proceda a revisar todos sus procesos de trazabilidad. Matizan que la fecha de consumo del producto era apta (preferente en julio de 2025), y cumplía con todas las garantías higiénico-sanitarias. También resaltan que se trata «de un producto de primera marca nacional y de referencia en el mercado» y que la implantación del sistema de Análisis de Puntos de Control Crítico, en el centro, garantiza la inocuidad de los platos producidos en cocina.