Feve termina la obra 7 años después pero no tiene reglamento para que operen los trenes

álvaro caballero | león

Casi siete años después de que el último tren saliera de la estación de Padre Isla, Feve anuncia que «la obra civil» de la integración «está prácticamente finalizada a falta de pequeños remates en las marquesinas». No queda nada, salvo «la modificación del enclavamiento ferroviario de la estación de La Asunción para la interconexión con el ramal tranviario, cuya fecha estimada de finalización es abril de 2018», pero sin embargo no hay fecha para la apertura de la línea. Ni para que los peatones estrenen el pasillo ferroviario, que va desde la terminal hasta el tope actual de las circulaciones, ni mucho menos para que operen los trenes. Ahora, desde el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) se aclara que todo «depende de la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria», que debe aprobar la reglamentación necesaria para que los trenes tram entren en modo tranviario.

La reglamentación es la misma a la que aludió el entonces presidente del Adif, Gonzalo Ferre, para justificar el 1 de junio de 2016 el desbloqueo de la obra, que se había ralentizado desde septiembre de 2013 y paralizado de facto desde diciembre de 2014. En la visita a la ciudad, el mandatario del ente gestor insistió en que es misma tarde, nada más regresar a Madrid, firmaría el documento necesario para avanzar en «la regulación» en la que había trabajado «desde Fomento, la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria y el Adif» para permitir que «sea posible por primera vez en España que un ferrocarril entre en modo tranviario en una ciudad».

Veinte meses después, esta reglamentación sigue sin existir, como admiten desde Adif y desde la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria. En ninguno de los dos estamentos dependientes del Ministerio de Fomento saben dar referencia de los plazos aproximados, más allá de insistir en que está «encima de la mesa». La explicación es la misma que dieron desde Renfe Operadora en el otoño pasado, cuando evitaron contestar a la pregunta de si ya cuentan con los trenes tram necesarios para funcionar en la línea, pero justificaron que esperan a que la agencia elabore un informe con las recomendaciones en materia de seguridad, «ya que se trata de un caso muy singular, puesto que se tiene que compatibilizar una red ferroviaria de interés general (RFIG) con condiciones de circulación particulares dentro de la ciudad».

Nada se sabe de este informe con las «recomendaciones de la agencia estatal» que deben «plasmarse en el Reglamento General de Circulación». La indefinición se extiende al resto de trámites necesarios para la puesta en marcha de los 2,6 kilómetros que van desde La Asunción hasta la terminal: las pruebas de línea exigidas por el verificador y que podría hacer Adif para certificar el funcionamiento; las circulaciones de los trenes tram de Renfe Operadora, donde se integra Feve; y la posterior formación de los maquinistas. Todo depende de la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria, repiten.