Un jurado de seis hombres y tres mujeres juzgará el crimen del joven dominicano
Los cuatro acusados se enfrentan a penas de 14 años de cárcel por el homicidio de Villavente
Lugar donde apareció el cuerpo sin vida de Dawry. FERNANDO OTERO
El Ministerio Fiscal solicita catorce años de prisión por homicidio y 18 meses de cárcel por tenencia ilícita de armas para las cuatro personas acusadas de participar en la muerte del joven dominicano Dawry Vilorio Almonte, ocurrida en Villavente en los albores de la primavera de 2020, cuando un amigo de la infancia se cobró un supuesto ajuste de cuentas por un robo previo del que hacía responsable a la víctima.
De acuerdo al escrito de calificaciones provisionales, entre las 18.00 y las 19.30 horas del día 25 de febrero de 2020, los acusados E.C.C., mayor de edad y con antecedentes penales que por el transcurso del tiempo no serían computables, H.C.V., mayor de edad y con antecedentes penales que por el transcurso del tiempo no serían computables, A.M.A. mayor de edad y sin antecedentes penales y J.L.J., mayor de edad y sin antecedentes penales, de común acuerdo, debido a que culpabilizaban a Dawry, amigo de E.C.C., del asalto que según el acusado al que se imputa la autoría material del crimen había sufrido en su domicilio esa misma mañana por dos desconocidos, en el que le habían sustraído dinero y posiblemente sustancias estupefacientes, realizaron los siguientes hechos en ejecución de un plan para matarle:
E.C.C., minutos antes de las 18.00 horas, había quedado por teléfono con D.V.A., y, acompañado por el acusado H.C.V., en el vehículo, conducido y propiedad del acusado, recogieron a la víctima en León. A continuación, recogieron al acusado A.M.A., al que previamente había llamado E.C.C., y al acusado J.L.J., al que había avisado A.M.A., y se dirigieron por la carretera LE-5508 y se introdujeron por un camino de tierra en el término municipal de Villavente.
Una vez en ese lugar, se bajaron del vehículo, llevando el acusado E.C.C. una pistola del calibre 9 milímetros parabellum oculta debajo de su ropa. La citada arma se encontraba en perfecto estado de funcionamiento y el acusado E.C.C. carecía de los necesarios permisos o licencias para su posesión. E.C.C. mantuvo un breve cruce de palabras con A.M.A., le dijo a H.C.V. que «revisara» a Dawry, y a continuación, sacó la pistola, le apuntó, le dijo que tenía que aparecer lo suyo, que había sido él (refiriéndose al robo en su casa) y finalmente le disparó un tiro en la cabeza. El proyectil impactó primero en la palma de la mano izquierda, que Dawry levantó como gesto de protección, saliendo por el dorso e impactando en el malar izquierdo para penetrar en la cavidad craneal.
Las heridas sufridas en la cavidad craneal le ocasionaron la muerte prácticamente de forma inmediata por severa destrucción de centros vitales encefálicos.
Tras realizar los hechos, los acusados salieron huyendo del lugar. Si bien, regresaron instantes después para recoger el teléfono y la cartera con documentación personal de Dawry. El arma de fuego utilizada no pudo ser hallada al deshacerse de la misma los acusados en su huida, así como del teléfono y la cartera del fallecido.
El cuerpo de la víctima, de 25 años de edad, fue encontrado dos días después, el día 27 de febrero de 2020, El acusado E.C.C., se encuentra privado de libertad por esta causa desde el 4 de mayo de 2020. Los acusados A.M.A., y J.L.J. estuvieron privados de libertad por esta causa desde el 18 de junio de 2020 hasta el 20 de julio de 2020.
El juicio comenzó ayer con la selección de los miembros del Jurado Popular. Son titulares seis hombres y tres mujeres, mientras que como suplentes figuran una mujer y un hombre. La vista continuará el lunes con las declaraciones de los cuatro acusados, uno de ellos en situación de prisión provisional.