León encarga un informe que mejore el deplorable estado de la limpieza en toda la ciudad

Después de cuatro años en el que la merma de la plantilla y las deficiencias en la organización han convertido la mugre y la basura en objetos cotidianos del paisaje urbano, el equipo de gobierno de José Antonio Diez estrena el mandato como si fueran nuevos . Con la limpieza disparada como foco de las principales  quejas de los ciudadanos , los rectores municipales del PSOE deciden ahora encargar una auditoría externa de «análisis y evaluación del servicio respecto a su estado y posible necesidad de aportaciones o mejoras al mismo». El problema, heredado de anteriores corporaciones pero acrecentado por la falta de actuación, se quiere atajar con la asistencia técnica de una empresa especializada para la que se dispone un gasto de 85.000 euros.

El trabajo se justifica desde el gobierno municipal con la excusa de que «el Ayuntamiento de León tiene municipalizado el servicio de recogida de basuras y limpieza viaria desde el año 2013, aprobado en el pleno municipal de 29 de enero de 2013», y al haber «transcurrido más de 10 años se hace necesario en la actualidad un análisis y evaluación del servicio». El encargo insta a la empresa que resulte adjudicataria mediante el concurso público convocado a cumplir con «el asesoramiento para la implantación de posibles alternativas para la optimización de dichos servicios».

Los pliegos de condiciones del concurso describen que «en cuanto a la limpieza viaria, se abordará en el estudio todo el término municipal con un planteamiento en que, en todas las zonas o barrios , o urbanizaciones consolidadas, se definan las necesidades que permitan mantener unos niveles de limpieza buenos», tras insistir en que se debe «analizar la frecuencia de cada zona para mantenerlos». La misma exhaustividad se reclama para el estudio de «la recogida de residuos» en «todo el término municipal orientado a una eficiente y efectiva recogida en todo él».

La auditoría encargada ahora por el equipo de Diez tras un primer mandato de inacción busca además que, «a modo de orientativo», la empresa externa realice «un estudio completo de los servicios de limpieza y recogida, su dimensionamiento y estudios económicos financieros necesarios». La firma adjudicataria contará con «doce meses para el desarrollo de los trabajos y análisis solicitados y la redacción del informe final». Este documento, como se avisa en los pliegos, «deberá ser aprobado en junta de gobierno local», en la que sólo están representados los concejales del equipo de gobierno, «previo informe técnico por parte del responsable del contrato».

El informe encargado tendrá que contar, entre otros datos con el análisis de «las distintas zonas de la ciudad», con un detalle pormenorizado de «niveles por calles o zonas de iguales características realizado mediante el empleo de reglas objetivas; el estado de los cuartelillos e instalaciones actuales; los sistemas de fregado, baldeo, barrido, etcétera, con las últimas tecnologías existentes respetuosas con el medio ambiente y más eficientes». El encargo afina que además se tiene que recoger «el dimensionamiento de las recogidas de las distintas fracciones en cuanto a medios recolectores y contenedores; el mantenimiento que sería necesario para todos los tipos de contenedores de superficie, para los soterrados, buzones neumáticos, etcétera; los diferentes sistemas de recogida especiales existentes para grandes productores; la implantación de la separación de la fracción orgánica mediante la implantación del quinto contenedor; y los criterios o circunstancias ambientales que puedan afectar a la actividad de la limpieza viaria y recogida de residuos».

El trabajo contará también con un estudio de «la existencia y necesidad del uso de maquinaria de tecnología adecuada y propia de los tiempos actuales; la limpieza de riberas urbanas y zonas fluviales la ciudad; y los dispositivos especiales y organización de limpieza en fiestas y eventos públicos».