Los padres del colegio Ponce reclaman más vigilancia vial a la entrada de clase

A primera hora coinciden los que se van a trabajar y los que llegan al colegio. Los horarios están bastante acompasados. Unos necesitan entrar y otros salen, y luego se cruzan. Ahí está el peligro, como alertan los padres de los alumnos del colegio Ponce, que insisten en que la acumulación de tráfico a las 09.00 horas hace que en la calle Serranos, donde hay varias zonas estrechas por la cercanía de los edificios, aumente el peligro de que un niño sea atropellado. A punto ha estado de suceder ya en varias ocasiones, como inciden los progenitores, que reclaman al Ayuntamiento de León ya desde el curso pasado que coloque una patrulla permanente a esa hora para mediar entre los viandantes y los conductores, que han tenido más de un altercado por ver quién debe ocupar la vía pública o esperar a que pase el otro.

Los padres inciden en que la acumulación de vehículos, que no se debe tanto a los residentes como a los padres de colegios del entorno que acceden por la cuesta de San Isidoro y quieren salir hacia El Espolón, no se ha atenuado siquiera con la medida disuasoria de colocar una valle en el cruce con el corral de San Guisán, lo que obligaba a los conductores a tener que desviarse por la plaza y salir por Santo Martino hacia la calle Abadía para abandonar el casco histórico. El obstáculo lo retiran los conductores sin problemas, como reseñan los afectados, que se los encuentran de frente en la puerta lateral del colegio y con prisa por ir a sus trabajos. Ahí está el máximo riesgo, recalcan los progenitores, que relatan que el intento de pasar de los coches coincide con la ocupación de la vía por parte de los escolares y quienes les llevan. No hay mucho sitio, como señalan, porque se trata de un espacio angosto en el que el muro del solar adyacente llega hasta la fachada del centro educativo.

Aunque ha habido agentes de forma intermitente, los padres solicitan que la patrulla vaya de manera fija, como sucede en otros colegios, para regular el tráfico. Por el momento, han optado por una acción pasiva como es la ocupación de toda la calle durante la entrada y salida acogidos a que se trata de una zona peatonal en la que, por normativa, tienen prioridad. Aunque hay conductores que no lo entienden.