La presión social contra la suciedad de León obliga a Diez a hacer una auditoría
El gobierno municipal desconoce ahora cuántos elementos tiene en el municipio, dónde están todos y cuál es su estado
Aunque «no se requiere realizarlo todos los años», sí que se debe hacer «pasado un periodo no inferior a los cuatro años», como se admite en la documentación redactada por los técnicos municipales. Pero la última vez que el Ayuntamiento de León actualizó el inventario del «número de mobiliario urbano vinculado al servicio de limpieza» data de 2017. Desde entonces, el equipo de gobierno de José Antonio Diez no hizo nada en todo el pasado mandato para cumplir con el trámite, mientras la plantilla se veía reducida de forma progresiva por las jubilaciones no cubiertas y la suciedad se convertía en la principal queja de los ciudadanos.
En este escenario, con las repetidas reclamaciones de los leoneses por la mugre que se ha asentado en muchas de las aceras y los contenedores que presentan un deterioro progresivo lamentable, tanto en los barrios como en la zona centro, el consistorio de la capital leonesa encarga ahora a una empresa externa que anote cuántos contenedores, buzones de recogida, papeleras, mupis y otros elementos asociados hay en el municipio, dónde está cada uno de ellos y en qué estado se encuentra. La tarea, al no contar el Ayuntamiento con «personal propio ni la tecnología necesaria para el desarrollo de este inventario», como se admite en los pliegos de condiciones, se encargará con una factura por debajo de los 10.285 euros que se anotan como tipo de licitación máximo del concurso, en el que se explicita que tendrá como adjudicataria a la empresa que presente la oferta más baja.
Obsoleto
El documento data de 2017 y, pese a que debe revisarse cada cuatro años, no se ha hecho nada
El encargo acabará al menos con la indefinición en la que se encuentra ahora el servicio, sin conocer con exactitud los «contenedores, papeleras, mupis», además de su «estado y ubicación», como se señala en el documento de contratación. Todos los elementos han de ser «georreferenciados, es decir, localizados mediante pares de coordenadas» para cumplir con «lo dispuesto en el Real Decreto 1071/2007, de 27 de julio del 2007, por el que se regula el sistema geodésico de referencia oficial en España»; además de que cada referencia debe incorporar «una fotografía digital que documente la existencia del mismo y su estado en el momento del inventario».
La entrega del trabajo le permitirá al Ayuntamiento de León contar con una radiografía fiable del estado del material del servicio de limpieza. No existe ahora. Pese a que se han hecho compras recientes de contenedores , financiadas parte de ellas con cargo a los fondos de la mancomunidad de interés general en la que se agrupan los consistorios de la conurbanción de la capital, los trabajadores admiten que no hay un control como el que se exige. El inventario que se maneja anota elementos que ya se han retirado, parte de los cuales no se arreglaron, no contempla el deterioro de otros muchos que necesitan cambiarse y carece de una planificación exacta de cómo se atienden las necesidades de los diferentes barrios y las tres pedanías que forman el municipio: Armunia, Trobajo del Cerecedo y Oteruelo de la Valdoncina.
Basura
La limpieza es el servicio que más quejas acumula en la ciudad, con el centro y los barrios abandonados
El contrato todavía no se ha adjudicado, después de que se licitara en el periodo de tránsito entre los dos mandatos. La empresa que lo haga se lo entregará al nuevo concejal de Limpieza, Jon Ander Fernández. El recién estrenado edil tendrá que afrontar la situación en la que se encuentra el servicio, que en el mandato se adscribió dentro de las funciones de la Concejalía de Desarrollo Urbano, dependiente de Luis Miguel García Copete, a quien el alcalde retiró la responsabilidad .