Las obras en Villadangos dejan ver ya el primer tramo de vía construido en León en 100 años

La primera vía ferroviaria de mercancías en el último siglo en León está a punto de cambiar para siempre el escenario conocido del alto Páramo, sus líneas de paisaje, el horizonte, los retazos y perfiles, ya manoseados a fuerza de implantar industria en la zona. El ramal de Villadangos se aproxima a cruzar la N-120, uno de los dos hitos estructurales que debe superar el nuevo enlace del ferrocarril , al que se encomienda todo el futuro de este enclave de Villadangos, polígono industrial, polo de atracción para la distribución y, ahora, base logística, plataforma intermodal.

Este es el salto cualitativo que aporta el enlace ferroviario al corazón del desarrollo de la provincia, en mitad de la arteria femoral que para este cuerpo de León supone el corredor del Camino de Santiago, para cohesionar y dar proyección al territorio provincial.

Justo en ese punto, la gran oportunidad, que parecía una utopía entre el aspecto desolador del tejido industrial leonés , también en el contexto de crisis que se hubo de solventar a la hora de gestar esta propuesta de armar un ferrocarril para facilitar el acceso y la fluidez de mercancías a Villadangos, se levanta ya por terreno apilado y cimientos de hormigón, por donde marcha el asiento para el paso de los trenes.

El curso del ramal está ya definido sobre una longitud de tres kilómetros y medio, que lo llevan hasta el mismo perímetro de la factoría de Coated Solutions León , tras describir una estela en forma de ese, de este a oeste, y contornear desde la conexión a la vía León-La Coruña y la entrada al polígono por la vía norte.

Descrito sobre el terreno el proyecto, tras casi dos años de intervención, se acomete la parte gruesa de la obra, que terminará por los viaductos elevados, el techo estructural del alto Páramo leonés, sobre la autopista León-Astorga y la carretera nacional 120, referente vinculado de forma directa el desarrollo del que aún está pendiente la provincia leonesa.

Se dispondrán más de medio kilómetro de zona de playas de vías, a modo de embudo en la apertura del polígono, con el fin de facilitar la opción de muelles de carga y descarga, aunque dentro de la fábrica de transformación del polo acerero se armará una vía de más de doscientos metros de acceso. Las últimas aproximaciones de autoridades a este ramal aportaron algunas posibilidades de remate de la obra antes de final del año en curso; aunque es más probable que finalice con el 2024 avanzado.