La Sareb tiene 523 pisos en León, 111 obras en curso y 737 suelos urbanos
El Gobierno no aclara cuántas viviendas se sumarán en la provincia al plan de alquiler social
El Consejo de Ministros aprobó este martes la puesta a disposición de 50.000 viviendas que la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) en el mercado para alquiler social y asequible . Una parte están ya construidas, otras tendrán que rematarse y se incluye también la cesión de suelos urbanizables para el desarrollo de nuevas promociones. De momento de las viviendas ya disponibles 2.288 están en Castilla y León (son en total algo menos de 21.000 a nivel nacional). Pero no pudo ofrecer datos de cuántas se integrarán en este programa en la provincia.
El ‘banco malo’ cuenta en León aún con 1.797 activos, de los que 523 son viviendas y 111 obras que están en curso. Además de 737 suelos. En el caso de las viviendas son casi el 19% del total de las que están en manos de la sociedad en el conjunto de la autonomía (2.794, pocas más de las que ofrece ya como disponibles». El paquete de propiedades en manos de la sociedad suma además 338 anejos y 88 terrenos de usos terciarios en León.
En el conjunto de la Comunidad, además de las viviendas, la Sareb posee 880 obras en curso y 3.836 suelos.
Las principales críticas que se realizan al proyecto se centran en que muchas de esas viviendas comprometidas no están aún en condiciones de habitabilidad, incluso no se ha iniciado su construcción; o que se encuentran en zonas donde realmente el mercado del alquiler no está tensionado.
En el caso de la provincia la capital tiene 199 del total de viviendas ya disponibles, un 38%. Le sigue Ponferrada, con 31 viviendas, Sariegos con 17, Villaquilambre con 12 y San Andrés del Rabanedo con 3. Entre estas poblaciones principales suman 262 viviendas, la mitad de las disponibles. El resto está repartido por localidades que desde luego tienen una demanda mucho menor de vivienda de alquiler.
Obras en curso en León
En el caso de las obras en curso, del total de 111 hay 20 desarrollándose en la ciudad de León, y otras 20 en Sariegos. Ninguna en Ponferrada ni en Villaquilambre y 5 en San Andrés. Por lo que se refiere a los suelos disponibles, que también se contabilizan en este paquete de medidas, León tiene 142 del total de 737 existentes, algo menos del 20%. La mayor parte, 259 (el 35%) están en Sariegos.
Todo ello pone de manifiesto que los municipios más poblados de León, y los que tienen mayor demanda de alquiler social, cuentan sólo con una parte del parque de inmuebles en manos del banco que rescató a las entidades financieras en la crisis y se quedó con unos activos que una década después sigue gestionando.
La iniciativa aprobada por el Gobierno se engloba en las actuaciones del Plan Estatal de Acceso a la Vivienda 2022-2025, que tiene el objetivo de aumentar el parque público de vivienda en 100.000 unidades.
La directora general de Vivienda, Arquitectura y Urbanismo de la Junta de Castilla y León, María Pardo, aclaró que el último listado de inmuebles de la Sareb en la Comunidad es de 2.376, de las que 886 son específicamente casas, de las que ni el diez por ciento está en condiciones de ser habitadas y el resto corresponden a trasteros o garajes.
Por su parte el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha propuesto una ayuda de emancipación a los jóvenes de 1.000 euros para pagar los gastos objetivos de alquiler o compra de una vivienda. Además, defendió ampliar el bono de alquiler joven e incrementar las cesiones de suelos dotacionales de ayuntamientos y autonomías para construir viviendas y cederlas con un precio de alquiler tasado que sea un 40% menor al precio del mercado.
Los tres ejes
El plan que finalmente se ha puesto en marcha se construye sobre tres ejes fundamentales. El primero, las 21.000 viviendas que se pondrán a disposición de autonomías y ayuntamientos para alquiler social y asequible. Ya están listas para vender, pero todo dependerá de que las administraciones locales firmen los acuerdos. El problema es que, de esa cifra de viviendas disponibles, unas 12.000 estarían pendientes de adecuación por su mal estado, con unos plazos estimados de entre ocho y nueve meses para las obras de rehabilitación, según confirman fuentes del Ejecutivo. Así que, en realidad, solo 9.000 inmuebles de este primer bloque estarían ya listos y disponibles para posibles inquilinos. El segundo pilar del proyecto son las 14.000 casas que ya forman parte del programa de vivienda asequible y social, habitadas actualmente por familias en situación de vulnerabilidad. Y por último otros 15.000 pisos aún sin construir. Es el Proyecto Viena, por el que se construyen edificios en suelo de la Sareb en colaboración público-privada. Fuentes del Ejecutivo indican que las licitaciones para estos desarrollos podrían comenzar a ver la luz este verano, pero tardarían entre dos y tres años en estar disponibles.
Sólo 9.000 pueden ocuparse ya
El plan para impulsar el alquiler social -anunciado por Pedro Sánchez a bombo y platillo en la conferencia municipal del PSOE como una solución para atajar el «problemón» del acceso de jóvenes y familias a la vivienda- se estrena con serias dudas sobre si el estado y la ubicación de la oferta lograrán finalmente adecuarse a la acuciante demanda.
El Consejo de Ministros dio luz verde al proyecto por el que el Ejecutivo se compromete a movilizar 50.000 viviendas de la Sareb en alquiler asequible. Pero, hoy por hoy, solo 9.000 inmuebles estarían disponibles ya para que un inquilino entre a vivir.
Del resto, muchos necesitan rehabilitación. Y unos 15.000 estarían aún por construir, un proceso que puede tardar entre dos y tres años, según estiman en el Ministerio de Economía. Desde el sector bancario, buenos conocedores de este parque de vivienda, recuerdan que muchas de ellas están ubicadas fuera de los centros urbanos de las grandes capitales, donde más se ha notado la presión de precios. Es decir, las zonas más tensionadas.
Fuentes de la vicepresidencia primera replicaron el martes que, frente a esa tensión, ya se han tomado medidas en la ley de vivienda, como el tope del 3% el próximo año en la actualización de los alquileres y que este programa puede aportar otras cosas. «Las viviendas de la Sareb están donde las compró el Gobierno del PP en 2012», esgrimen frente a las críticas del primer partido de la oposición para, a continuación, poner en valor lo que el programa puede aportar en términos de «vertebración territorial y desarrollo rural». Matizan, además, que también se ofrecerá a las administraciones la venta de suelo para otros objetivos sociales como la construcción de hospitales, escuelas u otros espacios públicos.
No es ese beneficio, en todo caso, el que dijo perseguir el presidente del Gobierno el pasado domingo cuando adelantó la medida de espaldas a sus socios de coalición, que, como EH Bildu y ERC, le acusaron de «electoralismo». El malestar de estos partidos tenía un fundamento claro porque no hace ni seis meses que lo socialistas votaron en el Congreso contra de una proposición no de ley de los morados para poner a disposición del parque público los inmuebles del banco malo.