Mesa redonda | La fuerza del cooperativismo
Las cooperativas reclaman su importancia para generar riqueza en el medio rural
Bajo el título “la fuerza del cooperativismo”, el II congreso de Agroalimentación organizado por Diario de León ha abordado en su primera mesa redonda, la importancia que este modelo productivo supone para el medio rural y para la lucha contra la despoblación.
Así lo considera César Reales, gerente de Agropal, una cooperativa de la que forman parte 8.000 familias de Castilla y León y Cantabria, de las que 600 se encuentran en la provincia de León, y cuyo mayor objetivo es conseguir para sus socios la mayor cantidad de beneficios económicos posibles, así como una mejor calidad de vida.
Esta cooperativa, que nació en Palencia en 1971 cuenta en la actualidad con siete instalaciones industriales, 15 tiendas y 35 almacenes repartidnos por toda Castilla y León. Como ha afirmado su gente, “Agropal parte de la semilla hasta el supermercado”, lo que implica que está presente en todo el proceso de producción, ya que fabrican desde las semillas que más tarde cultivan sus agricultores, hasta los fertilizantes. Otra parte importante de su negocio es la Industrial de la transformación, de la que forma parte seis sociedades que suman un beneficio de 341 millones de euros al año, con la fabricación de quesos, productos cárnicos, semillas certificadas, cereales y legumbres entre otros productos. También cuentan con 15 tiendas donde comercializan sus productos, que por otra parte también se venden a las principales cadenas de supermercados, y se encargan de su distribución.
Para César Reales, en los momentos tan complicados, el papel de las cooperativas está siendo fundamental para que a nadie le falte alimentos. Por este motivo, valora la línea en la que avanza la nueva Ley de Reforma alimentaria, que entre otras cosas, tiene como objetivo que los agricultores y ganaderos vendan a pérdidas. “Como sector, somos muy débiles a la hora de negociar los precios con las grandes superficies, no tenemos la suficiente fuerza, por eso necesitamos esta ley, para llegar a acuerdos equitativos para todas las partes y superar los costes de producción. Lo que se busca esta ley es que el campo sea rentable, ya que sin rentabilidad no hay riqueza y sin riqueza hay más despoblación”, insiste Reales.
Por eso considera que desde las administraciones hay que proteger más el sector del campo, por encima de otros sectores a los que se les da más importancia como por ejemplo al automovilístico, ya que se trata de un sector estratégico para garantizar la seguridad alimentaria.
En la misma línea se expresó César Pan, presidente de Prodeleco, cooperativa que representa a 70 socios de León y Zamora y que tiene su sede en Santibáñez de la Isla. Juntos producen 24 millones de kilos de patatas al año, un tercio de las que se cultivan en la provincia leonesa. Su principal valor es el almacenaje de la patata, algo que hacen en dos grandes almacenes, uno en Riego De la Vega, donde actualmente se guardan 13.000 toneladas, y el otro en Zamora, donde hay ahora mismo cerca de 8.000. “La patata no es como el cereal, sigue viva después de sacarla de la tierra, por eso hay que tenerla entre algodones, con la humedad y la temperatura adecuadas para que estén en perfectas condiciones cuando se vayan a cocinar, y eso nos ha costado mucho esfuerzo, e investigación”, ha apuntado César Pan, que ha insistido en que lo que más necesita ahora el campo ahora es apoyo, no sólo económico, sino técnico e intelectual. “Con una mala decisión puedes arruinar la producción de todos los socios, por eso es muy importante el trabajo de la gente cualificada, como los ingenieros”. Por este motivo reclamó la creación de un centro de capacitación agraria en León, que facilite mayor formación a los profesionales del campo, ya que “lo que ahora más necesitamos es gente cualificada”.
Pan también lamenta la falta de relevo generacional que sufre el campo. “Esto se debe en parte al retraso de las obras de modernización de los regadíos, ya que donde hay modernización hay vida”. En este sentido, también aprovechó para insistir en la necesidad de apostar por los cultivos hortofructícolas, que son los que más pueden ayudar a asentar producción. “Lo que no se entiende es que una lechuga venda de Murcia a transformarse aquí para luego llevarse a Madrid”.
El presidente de Prodeleco insistió en que gracias a su cooperativa en León se ha recuperado en cultivo de la patata, que en los últimos años había estado en declive, y se está ayudando a muchos agricultores que gracias a los beneficios que les reporta la cooperativa tienen una mayor capacidad de invertir en el campo.
Otro ejemplo de cooperativismo, se expuso de la mano de Emiliano Ursicino Miguélez, presidente de la Sociedad Cooperativa Comarcal de Valdevimbre. Esta cooperativa, que nació en 1970, llegó a producir 5 millones de litros de vino al año, aunque actualmente no llega al millón. Entre las causas, Ursicino culpa a la falta del relevo generacional que sufre el sector, que sobrevive gracias a la mano de obra extranjera, y a una importante amenaza que afecta a las cepas, el virus de yesca, un problema que según este experto hará que en los próximo años se pierdan mitad de las plantaciones. Por este motivo, pidió ayuda a las administraciones, para que apuesten por esa formación que les ayude a los viticultores a vencer este tipo de amenazas.
También lamentó la falta de ayudas, cuando por ejemplo en 2017, una helada en el mes de abril arruinó prácticamente toda la producción. El presidente de esta cooperativa también destacó que el sector del vino ha sido uno de los grandes perjudicados por la pandemia, ya que “al no salir la gente las ventas cayeron y tuvimos que recurrir a las ventas por Internet”. Sin embargo considera que vino cada vez tienen más auge, y apuesta por el atractivo turístico que tiene. Por eso pone en valor el proyecto para hacer en Valdevimbre la Ruta del Vino, ya que la DO León es la única denominación que no tiene, lo que puede beneficiar enormemente a la comarca, por los muchos atractivos gastronómicos y culturales que ya tiene.
Para terminar, Ursicino ha puesto en valor la importancia de las cooperativas que a su juicio “deben estar más unidas”, e insistió en la necesidad de inculcar su importancia desde el colegio. “Hay que llevar a los niños a ver explotaciones, viñedos, y fincas, por que igual de esa excursión salen dos agricultores, no todos van a ser médicos o funcionarios”, apunto.