Mañueco exige que no se margine a CYL con las ayudas por la sequía

El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, hizo ayer una exigencia al Gobierno de Pedro Sánchez, al calificar de «lamentable» el olvido a las infraestructuras de agua en Castilla y León. «Se han olvidado de apostar por las infraestructuras del agua, por modernizarlas porque haya más», insistió en su visita a Cantalejo, en el día de San Isidro. Mañueco también lamentó «la marginación de Castilla y León en las últimas medidas de ayudas a la ganadería» y también reclamó que rectifique.

Mañueco detalló que, en estas ayudas a la ganadería , Castilla y León ha recibido la calificación de «crisis medio», lo que «nos margina del resto del sur del país», cuando esta Comunidad va a estar ya, en los próximos días, en la misma situación en la que está el sur de España. «El Gobierno tiene que corregir y rectificar para que las ayudas ganaderas estén en las mismas condiciones que el resto de comunidades autónomas».

También felicitó, en el día de San Isidro , a todos los agricultores y ganaderos, a los hombres y mujeres que se dedican a la labores del campo, que además este año está siendo más esforzado que nunca por «lo adverso desde el punto de vista climatológico». Además, defendió que su Gobierno nunca ha dejado en la estacada a los agricultores y ganaderos y seguirán este año, como en los durísimos años de 2017 y 2019.

Por su parte, los labradores leoneses salieron ayer a la calle en un día festivo para rogar a su patrón San Isidro en un año lastrado por la sequía.

Una sequía que afecta a todo el país pero que en la provincia de León ya está dejando sin pastos a los ganaderos de la montaña en unas fechas en las que en años anteriores aún había abundancia de hierba para alimentar al ganado.

Situación nefasta se espera también en las cosechas de cereal en las tierras de secano donde esta misma semana el Instituto Tecnológico Agrario, dependiente de la Junta de Castilla y León, ya auguraba que será una de las peores de la década en trigo y cebada con rendimientos que se sitúan en torno al 90% de la media de una campaña normal.

Parece que sólo los regadíos, especialmente en las zonas modernizadas, salvarán el año ya que las nevadas y lluvias del invierno prácticamente llenaron los pantanos garantizando una campaña más o menos normal. Las dotaciones de agua de riego en la provincia, salvo las modificaciones que puedan llevarse a cabo en las próximas semanas, son las habituales.

El maíz volverá a ser el dueño y señor en estas zonas, pero cabe destacar un incremento espectacular en las siembras de remolacha que prácticamente se duplican en la provincia pasando de las 4.500 del año pasado a las 8.400 de éste.

La entrada en vigor de la nueva PAC (Política Agraria Común) con la necesidad del cumplimiento de estrictas medidas para poder cobrar la totalidad de las ayudas, con especial importancia de los Ecoesquemas, son otras de las circunstancias que también están marcando esta campaña en la agricultura y la ganadería leonesas.

Las organizaciones agrarias en su conjunto ya urgen a las administraciones la declaración de sequía y el establecimiento de ayudas especiales, principalmente para los ganaderos de extensivo que no tienen hierba para alimentar a sus animales y tienen que estar tirando de la compra de piensos a precios muy elevados que hacen inviables sus explotaciones.