Reportaje | m. j. alonso
Revuelta rural por la TDT
Las juntas vecinales más pequeñas del Bierzo Oeste se suman a la protesta iniciada por los vecinos de San Facundo
Los pueblos pequeños tendrán que adquirir una parabólica.
Fue el pedáneo de San Facundo, localidad perteneciente al municipio de Torre del Bierzo, quien abrió la veda de protestas por la «discriminación» de las zonas rurales más pequeñas en el reparto de la tecnología necesaria para la recepción de la Televisión Digital Terrestre (TDT).
Ahora, a esta causa se han sumado también las juntas vecinales de Pereje y San Fiz do Seo, que anuncian que son muchos los núcleos del ámbito rural de la comarca que se están uniendo a la protesta. Lo que reivindican es disponer de la misma tecnología que el resto y no tener que pagar más por ello. «No se instalarán repetidores de televisión digital en estos pueblos, sino que la solución es poner antenas parabólicas que se proporcionarán a través de empresas ya seleccionadas y con un coste mínimo de ciento y pico euros», aseguraron los representantes vecinales de Pereje y San Fiz do Seo.
La indignación es máxima y empieza a tener efecto dominó. Cada vez son más los pueblos que reivindican lo que consideran un derecho de todos. La necesidad de estar empadronado para poder instalar una parabólica y recibir la señal es el hecho más sangrante. «Se trata de una oferta válida en exclusiva para personas empadronadas en nuestros pueblos, con lo que los visitantes veraniegos o de fechas señaladas no tendrán derecho a ver televisión en sus casas, insisten en recordar los afectados.
Se sienten estafados, engañados y relegados a una segunda categoría. Aseguran que no están pidiendo «migajas ni favores», tan sólo los mismos derechos que el resto y que no se releguen a las zonas rurales a un plano secundario.