La demanda de energía por el frío pone en marcha Compostilla
CC.OO. cree que la reapertura de la térmica es coyuntural y urge la aprobación del decreto de ayudas al carbón nacional
La central de Compostilla, en una imagen de archivo.
Endesa puso ayer en funcionamiento tres de los cuatro grupos de la central térmica de Compostilla para hacer frente a la demanda de energía que ha provocado la ola de frío. La compañía encendió las calderas de los grupos tres, cuatro y cinco, según confirmaron fuentes sindicales, para generar mil megawatios por hora con la quema de carbón.
La central de Cubillos del Sil apenas ha funcionado con normalidad desde el comienzo de la crisis de los suministros de carbón nacional el pasado verano y desde CC.OO. consideran que la puesta en marcha de los tres grupos es una situación coyuntural, debido al aumento de la demanda de electricidad causada por el intenso frío de los últimos días. «También ha entrado en funcionamiento la central de La Robla y eso no significa que el problema de Compostilla esté resuelto», valoró ayer el responsable comarcal de CC.OO, Vicente Mirón, recordando que continúa el bloqueo a la entrada de carbón importado en la térmica, necesario para mezclar con el mineral autóctono almacenado en el parque de carbones.
«Cuando pase el temporal todo volverá a ser como antes», advirtió Mirón, que insistió en la necesidad de que el Gobierno apruebe el decreto que regulará las ayudas a la quema de carbón nacional, y que debe obtener antes el visto bueno de la Unión Europea, para que la térmica de Cubillos tenga garantizado su futuro a corto plazo y los trabajadores de Endesa puedan estar tranquilos.