La Junta licitará la reforma del acceso principal a Ponferrada antes de 15 días

Ningún giro a la izquierda. Una doble calzada separada por una mediana y aparcamientos en línea en el tramo del campus. La reforma del principal acceso a Ponferrada, el que acapara hasta el 70 por ciento del tráfico en las avenidas de Astorga y Montearenas, saldrá a licitación «la próxima semana o la siguiente», según adelantó ayer el consejero de Fomento de la Junta de Castilla y León, Antonio Silván, que viajó a Ponferrada para presentar sobre el terreno y con el alcalde un proyecto presupuestado en 4,7 millones de euros.

Una parte del dinero que la Junta no ha podido dedicar a construir un acceso al centro de Ponferrada desde el tramo de la N-VI situado por encima del Hotel Novo -"el Ministerio de Fomento desautorizó la glorieta proyectada argumentando peligro para el tráfico-" financiará en los próximos meses la reforma de la entrada principal a la ciudad, con sus intersecciones, los viales del servicio y dos calles del polígono de Montearenas. «Son 1.500 millones de las antiguas pesetas», enfatizó el alcalde, Carlos López Riesco, para resaltar la importancia del presupuesto de una obra que debe mejorar la seguridad del acceso y cambiar la imagen que los visitantes se llevan de la entrada a la capital del Bierzo.

Riesco destacó como la doble calzada para cada sentido de la circulación y las dos glorietas previstas para acceder a Santo Tomás de las Ollas y a la N-VI eliminarán todos los giros a la izquierda que en la actualidad incrementan la siniestralidad de un tramo donde además del tanatorio y la gasolinera, funcionan concesionarios de coches, supermercados y otros establecimientos comerciales.

La reforma, que también eliminará el riesgo para los peatones construyendo aceras, comenzará en la confluencia de la avenida de Astorga con la glorieta del Cine. En el primer tramo hasta el campus, se habilitará un aparcamiento en línea en ambos sentidos. La primera glorieta en el acceso a Santo Tomás contará en un futuro con otro entronque para enlazar con la Ronda Sur prevista en el Plan General de Ordenación Urbana. La segunda rotonda estará situada en la intersección con el vial de entrada a la ciudad desde la N-VI. Ambas glorietas conectarán con los viales de servicio del polígono industrial, donde se remodelarán dos calles principales.

Suavizar la orografía. El alcalde destacó además la importancia que concede a la primera impresión que se llevan los visitantes de la ciudad. De esta forma, ser realizarán movimientos de tierra para suavizar la orografía eliminando montículos y depresiones acentuadas y creando una pradera con rodales de arbolado de diferentes especies y riego automático. Plantas de porte bajo, con riego por goteo, ocuparán la mediana y las aceras contará con arbolado intercalado entre las farolas. Y el paso inferior bajo la N-VI, se tratará con un chorreo de arena y nueva iluminación. El objetivo es que el acceso más usado de Ponferrada deje de parecer una carretera y se convierta en una verdadera entrada a una ciudad.