El grupo Alonso hace trizas por cuarto día el precinto de su lavadero
Nadie puede con el grupo Victorino Alonso. Ni las administraciones públicas, ni la justicia. Lo demuestra fehacientemente su actitud respecto al precinto decretado el lunes por el Ayuntamiento de Fabero sobre su lavadero del grupo Alicia. Cuatro días después de que se ordenara el cierre de las instalaciones la actividad en el mismo continúa como si tal cosa con un absoluto desprecio a la legalidad. Los camiones cargados con mineral y las retroexcavadoras no han cejado ni un momento en sus labores. La compañía Uminsa se ampara en la presentación de un recurso contra el precinto y emplea como coartada sociolaboral el empleo que se pondría en peligro si se echara el cerrojazo a las instalaciones, carentes de licencias medioambientales. Así, en esta complicada enrucijada, acudirá a declarar la semana que viene el alcalde de Fabero, denunciado por IU por presunta prevaricación.