Ponferrada mejorará la ladera del Plantío y la senda al barrio de los Judíos
El Ayuntamiento invertirá 46.000 euros del Plan E para actuar sobre el paraje que separa el parque de la calle Caribe y terminar las obras antes del próximo verano
La ladera norte del parque del Plantío, con la calle Caribe del barrio de los Judíos en primer térmi
La ladera que separa el parque del Plantío del barrio de los Judíos de Ponferrada mejorará su aspecto antes del próximo verano. Una inversión de 46.000 euros servirá para financiar el movimiento de tierras necesario para suavizar la pendiente, plantar especies autóctonas y convertir el sendero de cien metros de longitud que asciende desde la calle del Caribe en una senda de dos metros y medio de ancho, reforzada con escolleras, muros de hormigón y una barandilla de madera.
El proyecto, presentado ayer por el concejal de Fomento, Luis Antonio Moreno, forma parte de las obras que el Ayuntamiento de Ponferrada financiará con los fondos del Plan E del Gobierno y permitirá mejorar una zona donde también está previsto que se construya a corto plazo un nuevo ascensor para unir el barrio de los Judíos con la zona alta de la ciudad, esta vez hacia el parque del Plantío. «En breve habrá novedades», adelantó el edil en la calle Caribe al ser preguntado por el que sería el segundo ascensor público de la ciudad después del que funciona en la calle General Vives.
La intervención en la ladera norte del Plantío acabará además con los pequeños derrumbamientos sobre la calle Caribe que ha venido causando la inestabilidad del terreno.
La concejal de Medio Ambiente, María Encina Pardo, que acompañó a Moreno durante la presentación, anunció que el Ayuntamiento eliminará los arbustos del desnivel que contribuyen a desestabilizar el terreno en lugar de afirmarlo, y los sustituirá por «especies más adecuadas».
Luis Antonio Moreno también destacó la importancia que tendrá el desbroce de la maleza para mejorar la situación de la ladera.
El edil de Fomento espera que las obras se desarrollen a lo largo de la primavera, para que los vecinos que usan la senda habitualmente encuentren un nuevo espacio para el paseo y un atajo a la parte alta de la ciudad antes del comienzo del próximo verano.