Reportaje | m. j. alonso
Los padres prefieren Iker y Lucía
En el 2009 se inscribieron en el registro de Ponferrada más de 850 bebés con sus respectivos nombres. Los gustos son variados, pero triunfan los simples
El nombre de la primera niña nacida este año está entre los favoritos, Claudia.
Al igual que para gustos hay colores, con los nombres ocurre lo mismo, aunque bien es cierto que en la mayoría de los casos los famosos juegan un papel destacado como referencia y condicionante. De hecho, no resulta nada raro que Iker se haya convertido en el nombre más usual para los ponferradinos en el 2009, teniendo en cuenta que una de las figuras más destacadas del deporte español se llama de este modo, Iker Casillas. Lo mismo ocurrió en su día con Raúl, Leticia, Borja o Leonor.
Si Iker es el nombre masculino más empleado en Ponferrada, Lucía es, con diferencia, el femenino. En este caso la novedad es mínima, dado que este nombre ocupa la cabeza de las preferencias desde hace varios años.
Atrás quedan los nombres típicos de España y los compuestos de José o María, reemplazados ahora por traducciones de otros idiomas, nombres cortos o diminutivos como Alex y Lola. Además, hay que tener en cuenta el crecimiento de la población inmigrante, lo que ha provocado un aumento de los nombres procedentes, fundamentalmente, de países sudamericanos. Cítese, por ejemplo, Valeria -”uno de los más escogidos-” o Yanira.
No obstante, hay nombres como el de María que perviven con los años y continúan siendo una de las preferencias. Lo mismo ocurre con Daniel, Adrián, Sergio o Alejandro, en el caso de los niños. También Mateo, Hugo, Pablo y Álvaro destacan por encima del resto. Entre las preferencias femeninas, los nombres de niña que -”por detrás de Lucía y además de María-” se han puesto en mayor medida a lo largo del 2009 son Paula, Sofía, Daniela o Alba.
Lo que no puede ser. Pero como en todo, la imaginación tiene límites y la Ley de Registro Civil no permite cualquier cosa. Quedan prohíbidos los diminutivos que no hayan alcanzado sustantividad, los nombres que perjudiquen a la persona, así como aquellos que hagan confusa la identificación y los que induzcan a error en cuanto al sexo. Tampoco podrá ponerse el bebé el nombre de uno de sus hermanos, a no ser que haya fallecido, o el mismo nombre pero en otro idioma.
Por estos motivos, han sido rechazados nombres somo Txema, Marisa, Charo, Juani, An, Sandy, Aimar para mujer, Charli o Caín. Precisamente en 2009, en Ponferrada, se dió el caso de Ian Caín, permitido por ser compuesto.