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Reportaje | c. fidalgo

Maratón de rezos

La iglesia del convento de clausura de las Concepcionistas en Ponferrada acoge una sesión de 24 horas de oraciones ininterrumpidas para captar seminaristas

La iglesia del convento de clausura de la calle del Reloj abrió sus puertas día y noche durante 24 h

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León

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Sacerdotes mayores, en muchos casos ancianos, que recorren kilómetros para celebrar misas en una docena de pueblos. Y sólo dos seminaristas estudiando en Astorga para relevarles.

La despoblación, el envejecimiento de los curas rurales y la secularización de la sociedad están poniendo en una situación delicada a la Iglesia, que no encuentra hombres jóvenes dispuestos a entregarse al sacerdocio. Y la solución pasa por rezar más, y de una forma más original, han pensado en la Delegación Episcopal de Pastoral Juvenil de la Diócesis de Astorga -"que incluye a la comarca del Bierzo en su demarcación-" organizadora de una «maratón de oraciones» que durante 24 horas y por relevos ha mantenido vivos los rezos de forma ininterrumpida en la iglesia del convento de clausura de las Concepcionistas, en la calle del Reloj de Ponferrada.

La maratón de rezos, que la Diócesis celebra por segunda vez, concluyó anoche con una Eucaristía oficiada por el propio obispo, Camilo Lorenzo, después de que en torno a mil quinientos fieles se turnaran desde las 21.00 horas del jueves a las 21.00 horas de ayer, para participar en la oración, coincidiendo con el Día del Seminario

«Los tiempos han cambiado y estamos en un proceso de secularización», reconocía ayer el sacerdote ponferradino Enrique Martínez Prieto, delegado de Pastoral Juvenil de la Diócesis, lamentando la carga de trabajo que acumulan los curas rurales.

Durante las 24 horas de rezos, la iglesia del convento de clausura ha permanecido abierta, día y noche, con el Santísimo Sacramento expuesto a los ojos de los fieles y al murmullo de sus oraciones.