Reportaje | A. Calvo
Un manantial en Valle Escondido
La Junta declara como termales, ya que salen a 20 grados de temperatura, y aptas para su embotellamiento y consumo las aguas que brotan en una finca de Arganza
Valle Escondido. Así se llama la finca de Manuel Fernández Díez en la que existe un manantial del que brota el agua a 20 grados de temperatura y con unas cualidades muy óptimas. No en vano, la Junta de Castilla y León ya ha dado el visto bueno y cuenta con dos declaraciones, desde el 2009 de agua mineronatural y desde este mismo año de agua termal. De este modo, de ese mismo manantial, situado en el municipio de Arganza, muy cerca de Canedo, podría embotellarse agua para el consumo humano o construir un balneario.
La finca, que cuenta con más de dos mil metros cuadrados, está actualmente en un proceso de subasta pública determinado por la Junta, que ha considerado el manantial como bien de interés común. «Me gustaría que, si alguien lo comprara, hiciera un balneario, más que una embotelladora de agua, porque sería un espacio que atraería a mucha gente a la comarca del Bierzo, como ocurre en otros lugares», precisó el propietario, que anuncia que en abril, si nadie adquiere la finca habrá otros seis meses de prórroga.
A 20 grados de temperatura. Para que un manantial consiga la declaración de agua termal debe brotar, como mínimo a quince grados de temperatura y en el pozo artesano de Arganza el agua sale a 20 grados. Además, Manuel Fernández Díez asegura que el agua es muy digestiva, diurética y depurativa.
A pesar de que el primer análisis del agua, realizado en Ponferrada, declaró que no era apta, el propietario decidió fiarse de la naturaleza y hacer caso a los gorriones que constantemente acudían al manantial. El año pasado, fueron los técnicos de la Junta los que dieron luz verde a la calidad del agua, lo que indica que es perfectamente apta para ser embotellada y vendida.
Fue en el 2001 cuando Manuel Fernández Díez decidió hacer una perforación en el terreno, a más de 150 metros de profundidad, para buscar agua de calidad. Casi una década de después ya cuenta con la declaración positiva del Ejecutivo autonómico.