Sala de lamentos y algo más

Hasta ahora el CES se había reunido por la preocupación del AVE, pero la sala no había dejado de ser poco más que un lugar de encuentro para lamentarse. Ayer tarde, antes de ir a la fiesta de la Deportiva Ponferradina, los integrantes del Consejo Económico y Social salían con la camisa sudada del despacho del presidente del Consejo Comarcal. Hacía calor en la sala, pero fue la primera vez que se dio un paso adelante y quedó patente entre todos -”de forma unánime, sin fisuras y sin ánimo de capitalizar políticamente la cuestión-” que «el Bierzo no puede renunciar al AVE», concluyeron.

Están dispuestos a pedir apoyo a las provincias limítrofes, a Lugo y a Orense. En la reunión de ayer se puso de manifiesto que la pizarra, la minería y la industria metalúrgica, amén de otros sectores económicos, lo están pasando mal en el Bierzo, y si ahora castigan a esta comarca aislándola de la red general de la alta velocidad ferroviaria, la recuperación será muy larga y un «mazazo» sobre la línea de flotación local. El presidente del Consejo Comarcal agradeció que el órgano asesor confiase en este organismo para encabezar las movilizaciones y ser equidistante en las sensibilidades políticas existentes.