Un tapiz floral cubre el Bierzo

Las sábanas bordadas y los ramos de flores tomaron ayer las calles de la comarca. Miles de pétalos de rosa cubrieron durante horas los sucios baldosines del suelo y la tradicional flor amarilla de las escobas cobró protagonismo entre las rejas de algunos balcones. El Bierzo entero celebró ayer la fiesta del Corpus Christi. Las comitivas procesionales partieron de sus respectivas iglesias y recorrieron las calles de las localidades bercianas en el contexto de una tradición que se resiste a morir. No faltaron, por supuesto, los niños que, por segunda vez en pocas semanas, vistieron sus galas de comunión.

Ponferrada, Bembibre, Fabero, Carracedelo, Puente de Domingo Flórez o Páramo del Sil fueron algunos de los municipios donde el tapiz floral del Corpus amortiguó los pasos de quienes salieron en procesión. Eso sí, sin profanar las alfombras elaboradas con esmero por algunos vecinos que en Bembibre, por ejemplo, trabajaron durante cinco horas hasta crear un tapiz de cien metros cuadrados de césped y pétalos de flores. En el mismo se plasmaron las imágenes diseñadas por Maite Parrilla.

En Ponferrada, la Basílica de la Encina observó la salida de la procesión, que recorrió varias calles del casco antiguo antes de llegar al convento de las monjas de clausura ubicado en la calle del Reloj.