Reportaje | r. arias
El Marca gana premios
La rehabilitación del Museo Arqueológico de Cacabelos (Marca), obra de Samuel Folgueral, gana el concurso de arquitectura del colegio de León (Coal)
El interior del Museo Arqueológico de Cacabelos, donde predominan materiales modernos.
La magnífica casa que don José Castaño Pose se construyó a finales de 1.800 en la calle de las Angustias de Cacabelos, en pleno Camino de Santiago, ha vivido muchas peripecias antes de convertirse en lo que es hoy, la flamante sede del Museo Arqueológico de la villa del Cúa (Marca).
A principios del siglo pasado los bajos del caserón fueron empleados como fábrica de gaseosas. Fue algo antes de que el inmueble fuese adquirido por el médico de la villa, don Genadio Núñez. En 1936 una empresa de Arganza destinó la casona a bodega, convirtiéndola en una de las principales exportadoras de vinos a Galicia y a todo el contorno. El Banco de La Coruña se quedó con ella en 1963 tras adquirirla a una familia de Carracedo, y la entidad crediticia acabó vendiéndola al Ayuntamiento cacabelense.
Desde mediados del 2008 es el Marca, el Museo Arqueológico de Cacabelos. Y desde hace sólo unas semanas, un ejemplo de excepcional restauración para el jurado del tercer Premio de Arquitectura del Colegio Oficial de Arquitectos de León (Coal).
El trabajo desarrollado por el equipo que dirige el ponferradino Samuel Folgueral ha merecido el primer premio del certamen en la categoría de «Restauración, rehabilitación e intervención de edificios privados o públicos».
Triple repercusión. En opinión de los especialistas que han ponderado la calidad de cada proyecto, entre ellos los principales representantes de las delegaciones de León, Palencia y Zamora, así como de la arquitecta de la Junta de Castilla y León, Amelia Biaín: «Por conjugar la adecuada construcción y restauración de la edificación preexistente con una correcta ampliación de arquitectura contemporánea».
El diseño del despacho de Samuel Folgueral conjuga efectivamente con notable equilibrio la antigua fábrica de la casa con la adaptación del interior a los usos museísticos, donde predominan materiales modernos que en ningún caso desentonan con el tono rústico de la antigua vivienda de don José Castaño Pose.
La transformación del edificio ahora galardonada no fue sencilla. El proyecto de rehabilitación tardó casi cuatro años en gestarse sobre una superficie de más de mil metros cuadrados. En las obras, ejecutadas por la empresa Econor, se invirtieron algo más de 1,3 millones de euros.
El reconocimiento es relevante porque el Colegio de Arquitectos de León (Coal) abarca con estos premios la obra desarrollada no sólo en la provincia, sino también en las de Palencia, Salamanca y Zamora.
El jurado de esta tercera edición premio lo integraron como presidenta, Pilar Morala Bueno, presidenta a su vez del Coal; como vocales, José Mateo Llorente Canal, Enrique Junco Navascués, Javier Jambrina Seco, Eusebio Alonso García, Heraclio Martínez Martínez, Amelia Biaín González, Carlos Muñiz Sánchez y Enrique de Teresa Trilla; y como secretario, con voz pero sin voto, Ángel Román Fernández.
El único de León. También se otorgaron otra media docena de reconocimiento en las categorías de interiorismo y diseño, de viviendas unifamiliares, multifamiliares o en la de edificación de centros públicos administrativos de nueva planta. El único primer premio que se quedó en la provincia de León fue el del Museo Arqueológico de Cacabelos, el Marca.