La Miño-Sil recupera la margen derecha del río Cabrera en Pombriego

La gran riada del pasado febrero se había llevado parte de la margen derecha del Cabrera a su paso por el pueblo de Pombriego (Benuza) y la Confederación Hidrográfica Miño-Sil dio ayer por finalizadas las obras de recuperación de este espacio fluvial, que además gana para los vecinos de la zona un espacio de esparcimiento.

Confederación ha invertido 75.000 euros y con este dinero se ha intentado recuperar la morfología del cauce de este afluente del Sil, que había experimentado una importante erosión en su margen derecha.

Según los datos facilitados por la Comisaría de Aguas con sede en Orense para evitar futuros daños y proteger el talud de la fuerza erosiva del agua, se ha colocado una escollera «que impide la incisión del cauce sobre la margen derecha». Dicha escollera se ha construido en un tramo de 150 metros, provista de una zapata que entra bajo el lecho del río 1,5 metros, con el fin de evitar que se produzcan posibles socavamientos al pie de la misma. Para integrar la escollera en el medio fluvial, después de su construcción se ha llevado a cabo la revegetación de la misma con «salicáceas», especie típica de los hábitats de ribera. «A largo plazo esta vegetación tendrá un papel estabilizador y protector de la margen y de la escollera mediante la fuerte cohesión que forman las raíces con el suelo», explican.