El PSOE intentó gripar el nuevo plan industrial de la Junta para el chopo
Apenas tres alcaldes socialistas acudieron a la convocatoria inicial del proyecto
Alcaldes y pedáneos socialistas brillaron por su ausencia en la cita del jueves en la Caja.
La convocatoria de las sociedades medioambientales de la Junta de Castilla y León y del Ayuntamiento de Ponferrada para revolucionar industrialmente el cultivo del chopo en el Bierzo obtuvo una respuesta notable el pasado jueves. Pero pudo alcanzar el sobresaliente. De que no fuera así se ocupó en buena medida la dirección del PSOE.
El resultado de la desmovilización inspirada desde las filas socialistas, según ha podido conocer este periódico, es que sólo tres de sus alcaldes se mezclaron con el cerca de centenar de regidores y pedáneos del PP que asistieron en la Obra Cultura de Caja España a la presentación del plan para repoblar más de 3.500 hectáreas de choperas en la comarca con un clon italiano que tiene en la actualidad una gran demanda industrial.
Ése fue el panorama que se encontraron el jueves el viceconsejero de Medio Ambiente de la Junta, José Manuel Jiménez Blázquez, y el alcalde de Ponferrada, Carlos López Riesco. La maquinaria orgánica del PSOE en el Bierzo movió los hilos para que desde el Consejo Comarcal del Bierzo se detuviera cualquier tipo de colaboración a la hora de organizar la presentación.
Aunque la coartada socialista para que en la presentación del plan industrial del chopo sólo estuvieran presentes los alcaldes de Peranzanes, Corullón y Castropodame -”éste de baja-” fue bastante meditada. A esa hora la ejecutiva comarcal del partido tenían convocada una asamblea para el cierre de las listas electorales.
La directriz de no contribuir al despegue del cambio de las plantaciones de chopo en el Bierzo por otras especies más productivas y generadoras de empleo también tiene otro trasfondo. El proyecto de la Junta de Castilla y León y de la sociedad medioambiental de Ponferrada, Altura, encuentra cierto paralelismo con el que desde la Fundación Ciudad de la Energía y ayuntamientos socialistas se abandera en tres explotaciones experimentales de chopo para estudiar su viabilidad económica como cultivos energéticos.
A pesar de las notadas ausencias, el viceconsejero de Medio Ambiente presentó un contrato por el que los ayuntamientos y las juntas vecinales tan sólo tienen que ceder los terrenos para la plantación de chopos y, a cambio, recibirán el 50% de los ingresos que generen los cultivos, ya que la entidad autonómica corre con todos los gastos.
La rentabilidad de las plantaciones propuesta desde la Junta para los ayuntamientos y pedanías de la comarca, además de para particulares, se complementa con la creación de puestos de trabajo, además de actividad económica para las pequeñas empresas locales.