La crisis obligó a cerrar una decena de establecimientos en el centro

Una decena de establecimientos que estaban ubicados en el centro de Ponferrada se han visto abocados al cierre durante el 2010. Así lo confirmó el gerente de la asociación de comerciantes La Cebra, Jorge Vargas, que achacó directamente a la crisis los problemas que están atravesando los pequeños comercios de la capital berciana.

Los principales afectados pertenecen al sector textil, el que más abunda entre los comercios de la parte baja de la ciudad y que representa el 80% de los establecimientos. «El constante descenso de las ventas desde el 2008 ya es en muchos casos insostenible», explicó Vargas, que sumó a estos cierres la pérdida de cerca de una veintena de puestos de trabajo en el sector.

Tan sólo se salvan de la mala situación económica actual aquellos negocios con tradición familiar, en el que los hijos han continuado la apuesta iniciada por los padres, que ya hicieron en su momento una fuerte inversión, comprando los locales, por ejemplo. Así, tiendas de alimentación o joyerías reducen el personal al máximo y consiguen sobrevivir.

Los cálculos de La Cebra apuntan que en la zona centro de la ciudad de Ponferrada existen al menos 350 establecimientos comerciales. A la crisis económica, Vargas añadió el daño al pequeño comercio que provocó la apertura del centro comercial El Rosal, que ahora se incrementa «porque no hay para todos». Pese a todo, los comerciantes tienen esperanzas porque las ventas de navidades han aumentado un poco respecto a la campaña del año anterior.