La concentración parcelaria deriva en reyertas vecinales

La concentración parcelaria llevada a cabo en la localidad de Quintana de Fuseros -perteneciente al municipio de Igüeña- ha llevado a enfrentamientos entre los propietarios de terrenos por la falta de acuerdo en el reparto parcelario resultante de la concentración. Los vecinos que se consideran perjudicados han formado una agrupación y puesto en manos de abogados las reclamaciones realizadas a la Junta de Castilla y León por ser ésta -dicen- «la responsable de este desaguisado».

Pero el problema no ha quedado ahí y el pasado fin de semana el asunto tomó tintes de reyerta vecinal, siendo pintadas con alquitrán las propiedades de algunos de los vecinos que se muestran contrarios a la toma de posesión de las fincas. «Un acto vandálico que hemos denunciado ya en el cuartel de la Guardia Civil para que se localice a los responsables», aseguraron ayer representantes de los afectados. Los hechos se produjeron después de la celebración, el sábado, de una reunión en el bajo de la vivienda de uno de los afectados. Encuentro con el abogado que, en un principio, iba a celebrarse en una de las calles de Quintana pero tuvo que pasar a casa de un particular porque fueron increpados. «Al amanecer del domingo aparecieron esta casa y la de otro propietario manchadas con alquitrán, en las puertas y en las entradas», explicaron.

Algunos vecinos llevan meses augurando sucesos de este tipo y enfrentamientos provocados por la falta de acuerdo entre quienes se oponen y quienes, en cambio, «están ejecutando las obras por su cuenta y riesgo, no siendo de su competencia, ya que corresponde a la Junta». Fue esta administración la que contrató a una empresa para el desarrollo de la parcelación, un trabajo que «no se ha realizado convenientemente». Explican los vecinos que «la concentración se efectúa para unificar propiedades y, al mismo tiempo, crear los accesos a todas ellas, y que para eso se pierde un porcentaje de la propiedad, para hacer los caminos». No obstante -critican- «en la parcelación realizada los propietarios de fincas de secundaria y terciaria no tienen accesos a las mismas». Asimismo, señalan que la diferencia en porcentajes es también desigual. «Lo habitual es perder en torno al veinte por ciento de la propiedad para la creación de accesos y nos encontramos con que unos propietarios han perdido hasta el 40 o el 60% de terrenos, mientras a otros se les ha triplicado».

La situación se agrava -reiteran- porque, pese a estar pendiente de revisión, «hay vecinos que ya han empezado a hacer zanjas y vallados en las fincas que deberían pertenecerles si la concentración fuera válida».