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Pereda denuncia el boicoteo del alcalde al pedáneo en las fiestas

Creen que Rubio se negó a ceder un edificio tras fichar Cachón por el PP

Cachón, candidato del PP.

Cachón, candidato del PP.

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c. f. c. | ponferrada
Ponferrada

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Los vecinos de Pereda de Ancares, en el municipio de Candín, han comenzado a recoger firmas para protestar contra la decisión del alcalde, el socialista Pablo Rubio, de negarles el uso de un edificio público para la celebración de las pasadas fiestas de San Jorge. El vecindario tiene intención de presentar en el Ayuntamiento un escrito de protesta, avalado por las firmas, después de que el pasado sábado, tuvieran que contratar la instalación de una carpa para acoger la comida popular del día de San Jorge, cuando el inmuble construido en el pueblo para albergar un Aula de la Naturaleza, cuyo uso habían solicitado sin éxito, permanece vacío desde hace diez años. El vecindario está convencido de que detrás de la negativa del alcalde se esconde el deseo de castigar a la población por su apoyo al pedáneo, el que fue teniente de alcalde socialista y ahora candidato del PP a la alcaldía de Candín, José Antonio Cachón.

«Eso ha sido una cacicada del alcalde», opinaba ayer en conversación con este periódico el vecino J.A, lamentando el desembolso que la pedanía, corta de recursos, ha tenido que realizar para alquilar una carpa donde el pasado sábado se protegieron de la lluvia dos centenares de personas que asistieron a la comida de la recuperada fiesta de San Jorge. «Y todo porque el otro candidato a la alcaldíla, José Antonio Álvarez Cachón es de ese pueblo», se lamentaba otra vecina a través de un correo electrónico.

El alcalde, con el que este periódico trató ayer de contactar sin éxito, habría justificado su negativa ante los vecinos con el argumento de que se podía estropear el edificio y los muebles. Pero los vecinos insisten en que el inmueble está vacío y no tiene ningún uso.

Los vecinos más descontentos iniciaron el mismo sábado una recogida de firmas para quejarse.

Un grupo de vecinos había decidido recuperar la fiesta patronal de San Jorge aprovechando que este año coincidía con el Sábado Santo y el pueblo estaría lleno de antiguos residentes. Al final, la fiesta se celebró igual, bajo la carpa de alquiler, y con el Aula de la Naturaleza de propiedad municipal vacía.

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