Ponferrada tendrá un embarcadero de ocio en el Sil en el puente García Ojeda
La Confederación autoriza al Ayuntamiento a utilizar el río como canal de piraguas
El río Sil contará con un embarcadero para practicar piragüismo o paseos de ocio en pleno casco urbano de Ponferrada. La Confederación Hidrográfica Miño Sil comunicaba pro escrito la autorización necesaria al Ayuntamiento y el alcalde, Carlos López Riesco, anunciaba ayer que este embarcadero se emplazará entre el puente García Ojeda (junto al castillo) y el del Ferrocarril.
Las obras de esta nueva zona de ocio o recreo deportivo correrán por cuenta del Ayuntamiento. Existe ya un proyecto de actuación, que contempla la mejora de los accesos al río para las embarcaciones, además de la construcción de un almacén para el material. Si el acceso al embarcadero se ubica en la margen derecha del río aguas abajo, el almacén irá en la margen opuesta, en la falda que da al castillo, aguas abajo. En concreto prácticamente al lado de la pasarela peatonal existente.
El coste del proyecto no ha sido cuantificado, pero se estima que no sea muy elevado, dado que la intervención necesaria para actuar en la zona no requiere un gran trabajo. Lo que sí se conoce es el plazo de ejecución, que es de doce meses, aunque la previsión es tenerlo hecho antes de un año.
Según puso de manifiesto el alcalde, la intención es, además de construir las infraestructuras necesarias para la práctica de este deporte en el cauce fluvial en la ciudad, dotarlo de contenido con la organización de un detallado programa de actividades.
Carlos López Riesco señaló que se trata de «un espacio más de ciudad, un elemento atractivo» para la oferta deportiva y de esparcimiento de los que habitan Ponferrada. El alcalde recordó que, después de la importante intervención realizada al río Sil, para recuperarlo para la ciudad, con paseos a ambos lados, la autorización de la Confederación Hidrográfica viene a dar le un plus añadido.
«Antes el río Sil separaba la ciudad -"manifiesta el alcalde-" y hoy es un lugar de encuentro, de unión, de ocio, de esparcimiento; y de un río al que no accedía nadie, donde había ratas, hemos pasado a poder pasear, hacer deporte y ahora piragüismo, en un río limpio, con aguas libres de vertidos».
Una vez que se ponga en marcha este embarcadero, al contar con la autorización de la Miño Sil para su uso deportivo, se pretende incentivar en lo posible su uso a través de las escuelas deportivas. También se abre la posibilidad para la utilización de cualquier aficionado a estas prácticas de ocio y disfrute. La iniciativa había sido reivindicada en varias ocasiones al Ayuntamiento por aficionados y se había demorado hasta ahora, al contar con permiso oficial.