Los trastornos de alimentación en adolescentes, a estudio en el Bierzo

Cambios de humor, rechazo a asistir a celebraciones que incluyan comida, ruptura con los amigos y obsesión por hacer dietas pueden ser algunos de los síntomas que avisan de un trastorno de la alimentación, tal y como apuntó el presidente de la Asociación Española de Enfermería y Salud, Luis Miguel Alonso, que participó ayer en la conferencia sobre los trastornos de la alimentación que abrió los actos de las jornadas Crece Conmigo, organizadas el Ayuntamiento de Ponferrada. «Es un reflejo de lo que cada uno no puede controlar frente al peso, que sí lo pueden controlar, lo que les genera sensación de poder», explicó Alonso para añadir que es preciso formar y prevenir y detectar la enfermedad cuanto antes, «ya que cuanto más se prolongue más difícil será salir», y que son enfermedades como la anorexia, la vigorexia, la bulimia o el trastorno por atracón, que afectan principalmente a los adolescentes.

La asociación, en colaboración con el Sacyl, empezará antes de enero a trabajar en un estudio a nivel provincial, y organizado por comarcas, para conocer cuál es la situación de este tipo de enfermedades, ya que existen pocos análisis de estas enfermedades y los que hay son muy antiguos. «Con estudios seudocientíficos se calcula que en los últimos años esta enfermedad ha aumentado un 10%; aunque antes afectaba a un hombre por cada diez mujeres esta cifra ha crecido y ya son dos por cada decena de chicas», explicó el presidente nacional de la asociación Enfermería y Salud.

Tanto Alonso como la coordinadora programa para la prevención de estos trastornos, Isabel Revilla, incidieron en que estas problemáticas alimenticias «son enfermedades mentales», por este motivo, «no hay que tener miedo a enfrentarse a ellas porque se puede salir y uno puede recuperar su vida plena», explicó Revilla, que añadió: «Vivir es diferente a sobrevivir».