El comité someterá a votación las bajas incentivadas en LM
Algunos operarios ya han aceptado los 65 días por año trabajado
Un trabajador de LM, en una imagen de archivo.
Están conformes con la oferta lanzada por la dirección de la empresa pero no descartan movilizaciones si finalmente los trabajadores así lo deciden. Esto es lo que aseguró ayer el presidente del comité de empresa de LM Wind Power, Pedro Calvo, para quien las bajas incentivadas planteadas por la compañía de palas eólicas para los operarios de la factoría de Ponferrada es la menos mala de las opciones barajadas. Quieren evitar a toda costa un expediente de extinción de empleo que no sería tan ventajoso para los empleados y que causaría gran incertidumbre, ya que «se sabe como empieza pero nunca como acaba» -”significó Calvo-”, pero no dejan de oponerse a nuevos recortes. Más en el contexto actual en el que se mueve la comarca, inmersa en una oleada de paro.
Corroboran que los niveles de producción han bajado mucho en los últimos meses, aunque aseguran que un recorte como el previsto -”250 de los 400 operarios que hay en la actualidad-” «no tiene excusas que valgan». Así, el comité deja en manos de la plantilla su futuro. Hasta ahora, las asambleas han sido informativas, ahora se plantea una votación. Es decir, que los afectados, reunidos en asamblea, decidan si aceptan o no lo que la dirección les ha planteado. Si la mayoría se muestra en contra, llegarán hasta donde sea necesario y hablan incluso de movilizaciones.
Lo cierto es que ya hay trabajadores que han aceptado los 65 días y los 1.500 euros brutos por año trabajado. Se desconoce el número, pero el comité tiene constancia de que a lo largo de la mañana de ayer se sucedieron los acuerdos. Mantienen, no obstante, que «son ellos los que tienen la última palabra» y se muestra malestar por el hecho de que la empresa haya actuado por su cuenta, sin ningún tipo de negociación o diálogo con la parte social.
La visión de Otazu. El gerente del Servicio Público de Empleo de la Junta en León, Francisco Javer Otazu, consideró ayer que si la dirección de LM ha decidido reducir su plantilla responde a una «situación objetiva». Un momento de crisis que, según Otazu, la sociedad debe aprovechar para aunar esfuerzos y buscar nuevas formas de generar empleo.