La Miño-Sil multará a Ponferrada si no acredita el caudal ecológico del Oza
El Ayuntamiento debe demostrar que cumple con el volumen máximo de captación
El embalse de Bárcena, de donde también capta agua el Ayuntamiento de Ponferrada para el abastecimie
Por incumplir semanalmente con la obligación de presentar ante la Confederación Hidrográfica Miño-Sil los datos relativos a la captación de agua del río Oza y del embalse de Bárcena. Este ha sido el motivo por el que el Organismo de cuenca ha abierto un expediente sancionador contra el Ayuntamiento de Ponferrada, que debería haber empezado el día 1 de junio a comunicar los volúmenes máximos diarios y los caudales ecológicos mínimos ante la existencia de problemas de abastecimiento en la época estival. Una medida circunstancial que dejará de aplicarse el 30 de noviembre.
Por el momento, la Miño-Sil no ha dado a conocer la cuantía de la multa a la que podría enfrentarse el consistorio ponferradino a fecha de hoy. «Va a depender de si el Ayuntamiento empieza a remitir a la Confederación la información requerida o no. Si empieza a presentarla ya, el sancionador se referirá a estas tres semanas», especificaron fuentes de la entidad hidrográfica. Y es que el nuevo requerimiento remitido por la Miño-Sil se produce casi un mes después de que Ponferrada debiera estar acreditando la información expresamente solicitada.
«La toma de agua del río Oza ha sido tradicionalmente fuente de abastecimiento de Ponferrada, pero dado el incremento de la población servida en los meses estivales de los últimos años, este organismo ha observado una sobreexplotación que no asegura el caudal ecológico -”de 50 litros por segundo-”, ni los caudales de otros concesionarios situados aguas abajo, lo que ha motivado la queja de los usuarios», argumentaron desde la Confederación para explicar el porqué de tal requerimiento. El objetivo es demostrar que, en ningún momento del día, la capital berciana supera el caudal máximo concedido.
El incumplimiento por parte de la Administración local marca un capítulo paralelo a la brecha ya abierta entre ambas instituciones por el soterramiento del Canal Bajo del Bierzo. Unas relaciones tensas que en las últimas semanas parecían haber desembocado en un inicio de acuerdo y entendimiento, y que ahora sufren un nuevo revés con la apertura de dicho expediente y a la espera de la explicación que pueda dar el Ayuntamiento.
La decisión que la Confederación se fundamenta en una orden ministerial aprobada en el 2009, por la que se regulan los sistemas para realizar el control efectivo de los volúmenes de agua. Una medida que «no consta» estar siendo cumplida por Ponferrada, aseguraron.