El descifrador del genoma berciano
El poeta Amalio Fernández recibió en Ponferrada un homenaje póstumo en el que fue . recordado como un artista único en la descripción de gentes y paisajes del Bierzo.
Roberto Arias, con la nieta del poeta y los periodistas que leyeron sus poemas, a la espalda.
La iglesia ponferradina de San Andrés concitó ayer en su interior la emoción propia de un recuerdo, el del polifacético artista berciano Amalio Fernández, poeta, fotógrafo y miembro destacado de la Hermandad de Jesús Nazareno. Fue esta cofradía la encargada de organizar el homenaje lírico-musical celebrado con motivo del centésimo aniversario de su nacimiento. Periodistas y comunicadores bercianos pusieron la voz a las palabras que un día Amalio Fernández plasmó sobre el papel. También su nieta, Beatriz González, lo hizo con la poesía Recuerdos . La iglesia estaba llena, con la familia en primera línea.
«Amalio exhibió una extraña conexión genética con la cámara desde su juventud. Y yo diría que de algún modo es un trasunto de Craig Venter del arte, el descifrador de la secuencia del genoma berciano, de sus gentes, de sus paisajes. En color y en blanco y negro». Fueron estas palabras destacadas del discurso del delegado en el Bierzo de Diario de León, Roberto Arias, maestro de ceremonias encargado de la presentación del acto. Arias aludió a la obra fotográfica del poeta como el ejemplo perfecto de que «una imagen vale más que mil palabras. Diez mil. Un millón de palabras». No obstante —acertó— también dos solas de sus palabras poéticas «logran evocar cientos, tal vez miles de imágenes».
Diego Luis González, Mariví Pumariega, Yolanda Ordás y Belén Vecino fueron los profesionales de la comunicación encargados de ponerle voz a los poemas con un tímido acompañamiento musical. Una grabación de Luis del Olmo completó el reparto. Entre el público estaban el alcalde de Ponferrada, el presidente del Consejo Comarcal y el recto de la basílica de La Encina.