Diario de León

La dirección de LM procede al cierre patronal de la factoría

El turno de noche ya no entró a trabajar y desde el Comité de Empresa aseguran que está «totalmente injustificado»

Instalaciones de LM en Santo Tomás de las Ollas

Instalaciones de LM en Santo Tomás de las Ollas

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V. Silván/ ICAL

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La dirección de la compañía LM Wind Power procedió ayer por la noche al cierre patronal de la factoría de Santo Tomás de las Ollas, en el municipio de Ponferrada, alegando la existencia de notorio peligro de violencia para las personas o de daños graves para las cosas –uno de los supuesto que recoge la ley para estos casos-, según confirmó el presidente del Comité de Empresa, Gabriel Garnelo.

Aunque la sombra de cierre pendió sobre la planta durante toda la jornada de ayer, no fue hasta última hora cuando se hizo efectiva. Antes de la entrada del turno de noche –que comienza a las 23.00 horas-, el personal de seguridad informó directamente del cierre a los trabajadores que querían acceder a su puesto y requirió su salida a los empleados que estaban dentro.

Para Garnelo, esta decisión unilateral de la empresa está totalmente «injustificada» y aseguró tajante que «no tienen argumentos». «Todo lo que alegan es que no pueden garantizar la seguridad de las personas y las cosas, que es uno de los puntos que establece la ley para realizar un cierre patronal, pero está totalmente injustificado porque aquí no ha habido altercados ni conatos de violencia», explicó el responsable sindical.

Un grupo de trabajadores permaneció toda la noche a las puertas de la factoría con varios coches aparcados para controlar las entradas y salidas, con la presencia de dos patrullas de la Policía Nacional que, puntualizó Garnelo, «son las que tienen que levantar acta de todo lo que ocurre aquí y aquí no sucede nada, por eso este cierre no tiene razón de ser». 

El Comité de Empresa está convocado esta mañana a una reunión con la empresa para la presentación de documentación relacionada con la reestructuración de la plantilla –está prevista la presentación de un nuevo ERE que afectará ahora a 88 personas y después a los 121 trabajadores que quedarán en la planta hasta 2012-. «Nos reunimos mañana, en teoría, porque la cita es en la planta y ya no sabemos si se producirá o no al estar cerrado», afirmó Garnelo.

Ahora la empresa dispone de 12 horas desde que ordenara el cierre patronal para informar a la autoridad competente, en este caso la Oficina Territorial de Trabajo de León. A este respecto, el presidente del Comité de Empresa señaló que hoy presentarán un escrito ante la compañía para instar a la reapertura del centro de trabajo y también pedirán a Trabajo que intervenga para que no se prolongue más el cierre

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