La fábrica de torres eólicas sigue vigente y sin actividad
Ursicino Sánchez y José Peláez, ayer en la sede de CC.OO.
La actividad de Coiper en Santo Tomás de las Ollas será nula, inexistente. No obstante, aunque la fábrica se cerrará, la empresa no se liquida ni desaparece, sino que se mantiene activa con la intención de buscar nuevos nichos de mercado y con vistas a reabrirla si vuelve a ser factible. Al menos así se lo explicó la dirección de la compañía de torres eólicas a los delegados sindicales, aunque bien es cierto que estos no han quedado convencidos de tal razonamiento.
«La intención de la empresa es reanudar la actividad si vienen tiempos mejores», aseguró Ursicino Sánchez, añadiendo además que la dirección se ha comprometido a recuperar a los 66 trabajadores ahora despedidos si se reanuda la actividad. Ésto dicho de palabra, porque «no ha quedado nada escrito», al menos hasta que hoy se firme el acuerdo. «No se ha llegado a un acuerdo sobre si con una nueva apertura estos operarios tendrían ventajas», resumió el responsable de la Federación de Industria de Comisiones Obreras.
En busca de mercado. La empresa ha garantizado a los sindicatos que todavía a día de hoy, pese a haber anunciado el cierre, continúa negociando nuevos pedidos. Así lo transmitieron ayer Sánchez y el delegado de CC.OO. en Coiper, José Peláez. «Aseguran que están intentando llegar a acuerdos con diversos clientes, pero parece que estos no fructifican. Ellos sabrán por qué», dijo Ursicino Sánchez.