Cosmos reta de nuevo a la comarca con el reinicio de su proyecto incinerador
Cimpor volverá a pedir autorización para quemar residuos si funciona la biomasa.
Vista general de la cementa que Cosmos tiene en Toral de los Vados, en una imagen de archivo.
Pese a que la sociedad berciana se echó a la calle y la Junta de Castilla y León paralizó su proyecto para la coincineración de residuos en el proceso de producción de su planta de Toral, Cosmos no se detiene. La cementera, definitivamente, no renuncia a la valorización y ha vuelto a dejarlo patente en medio de la controversia sobre si es viable o no la introducción de biomasa en sus calderas.
De momento es cierto que su única prioridad es la quema de biomasa forestal. Pero si esta experiencia sale bien, el siguiente paso será conseguir autorización para la incineración de otro tipo de residuos. Una intención ya anunciada a finales del pasado mes de diciembre y recogida en las páginas de este periódico que ayer refrendó la empresa a través de su gabinete de comunicación
Podrían ser neumáticos o combustibles derivados de residuos (CDR). Todo dependerá, según palabras de un portavoz oficial del grupo Cimpor —propietario de la cementera de Toral de los Vados—, de «los excedentes que haya en la zona».
De momento, la compañía no ha puesto en marcha el aparato legal más allá del recurso de reposición que presentó hace meses para manifestar su oposición a la prohibición de quema de residuos alternativos efectuada por la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León. Para Cosmos, aquel recurso es cosa del pasado y su idea es iniciar de nuevo todo el procedimiento de solicitud de licencia. Algo que todavía no se ha hecho. Volverán a elaborar una memoria y un informe técnico que avale que las instalaciones cumplen con las exigencias legales para tal práctica. Y es que desde la empresa siempre han defendido que en ningún momento la quema de residuos alternativos resultaría nociva para el medio ambiente y la salud de los bercianos.
«En estos momentos, estamos a la espera de que la Junta de Castilla y León nos conceda autorización para la quema de restos de poda. Luego, sí todo sale adelante, iniciaremos el período de pruebas, con las pertinentes mediciones», explicó el mismo portavoz.
Por lo tanto, si tras unos meses en funcionamiento, la incineración de biomasa funciona, el siguiente paso se dirigirá directamente al origen de todo, la utilización de combustibles alternativos a la hulla, el coque de petróleo o el carbón.
No obstante, desde la dirección del grupo empresarial que maneja Cosmos han querido dejar claro que «la biomasa no abre las puertas a nada». Quiere esto decir, que la autorización solicitada es exclusivamente para quemar restos de materia forestal. Para otro tipo de combustibles, se abriría un procedimiento paralelo pero totalmente independiente.
La reiteración de Cosmos en sus intenciones acerca de la introducción del sistema de coincineración de residuos, que la empresa siempre tacha de no peligrosos, amenaza con desatar de nuevo la contestación contundente de los consejos agroalimentarios y de los grupos ecologistas.