Los vecinos exigen una ordenanza más restrictiva contra las antenas telefónicas
Denuncian «falta de voluntad política» y presentarán alegaciones a la ordenanza del PP.
No están de acuerdo con el rol pasivo que quiere desempeñar el Ayuntamiento de Ponferrada y acusan al equipo de gobierno del PP de «falta de voluntad política». Los vecinos de los barrios afectados por la instalación de antenas de telefonía móvil exigen una ordenanza reguladora menos ‘light’ y más restrictiva que la planteada el martes por el alcalde, Carlos López Riesco, y el concejal de Urbanismo, Juan Elicio Fierro. «El Ayuntamiento puede regular la densidad de las antenas y puede tener en cuenta que hay zonas sensibles a la instalación de las mismas», aseguró el vicepresidente de la Federación de Asociaciones de Vecinos, Miguel Ángel Trejo, para quien la normativa debe ser, por encima de todo, protectora de la salud de los vecinos. «Es una ordenanza laxa que va a seguir permitiendo poner antenas indiscriminadamente y las compañías telefónicas seguirán campando a su libre albedrío», se lamentó.
Una línea de desacuerdo seguida también por los portavoces vecinales de los barrios de Cuatrovientos y La Estación. El primero, Miguel Ángel Orallo, consideró que «el Ayuntamiento puede hacer mucho más» que centrarse en el impacto visual o ambiental de las antenas. De hecho, su convencimiento es tal que la próxima semana los vecinos de este populoso barrio ponferradino presentarán alegaciones a la ordenanza que el PP pretende llevar a Pleno. Orallo asegura que, en su caso concreto, aportarán pruebas que demuestran que «el edificio no reúne las requisitos necesarios para poder instalar una antena de telefonía móvil». Parece que la legislación vigente ampara el hecho de que se ubique en las inmediaciones de dos centros escolares y las proximidades de zonas deportivas y de uso infantil.
«Tienen que ser más concretos y posicionarse de una manera definitiva porque sí podrían impedir que la antena se colocase al lado de los colegios, por poner un ejemplo», aseguró Orallo, dejando claro, en todo caso, que la movilización vecinal surgida no ha nacido movida por un interés político, sino simplemente por que no quieren tener una instalación de estas características cerca.
También el presidente de la asociación vecinal de La Estación, Jesús López, lamentó la inacción del equipo de gobierno local y emplazó al alcalde a que abra una mesa de debate e invite a los parlamentarios de su propio grupo, sí de verdad tiene interés en poner fin al problema, para que «se comprometan a llevar el tema al ministerio competente».