Protesta tranquila en Ponferrada frente al vandalismo estudiantil de Bembibre

Medio millar de estudiantes se concentraron pacíficamente en la plaza del Ayuntamiento de Ponferrada para alzar su voz contra los recortes que está planteando el Gobierno de Rajoy. En Bembibre, un centenar de alumnos también respondieron a la llamada realizada a nivel nacional y, a pesar de que la convocatoria incluía un crítica a la dureza policía en el instituto valenciano Lluís Vives, los alumnos del Bierzo Alto no predicaron con el ejemplo. El alcalde, José Manuel Otero, y varios agentes de policía fueron el objetivo de un intenso lanzamiento de petardos, que también hicieron diana en las bolsas de basura que extendieron por toda la plaza tras vaciar los contenedores. Además, lanzaron huevos contra la casa consistorial.

«Esta no es forma de reivindicar nada porque los desperfectos os quitan la razón y después lo pagamos todos», les dijo el alcalde en un intento de negociar y calmar a los estudiantes, que permanecieron durante más de una hora en la plaza, durante la cual intentaron «adueñarse del Ayuntamiento». La plaza Mayor de Bembibre quedó como un vertedero tras el paso estudiantil, lo que fue duramente criticado por los viandantes y espectadores de la protesta.

En Ponferrada los jóvenes denunciaron que los recortes habían reducido el horario de la calefacción en los institutos Álvaro de Mendaña y Virgen de la Encina y se hicieron oír con lemas como ‘menos policía y más educación’ y pancartas en las que se leía ‘no es país para jóvenes’ o ‘yo también soy el enemigo’.

Respuesta sindical. Cerca de medio millar de personas se concentraron ayer a última hora de la tarde ante la sede de la Junta en Ponferrada secundando la llamada de UGT y CC.OO. contra la reforma laboral. Los líderes de ambos sindicatos, Omar Rodríguez y Vicente Mirón, anunciaron que al menos seis personas ya habían sido despedidos en el Bierzo aplicando «una medida que va en contra de los trabajadores». «Lo último sería una huelga general, primero hay que apostar por el diálogo y las negociaciones», dijo Omar Rodríguez. Mirón, que respaldó estas palabras, recordó que las protestas también son a nivel europeo y exigió que se abriera una mesa de diálogo. Además, reiteró las palabras para acusar a las patronales de «traficantes de esclavos» al hacer referencia a las charlas informativas en las que «se venden las bondades» de la reforma laboral que fue aprobada el pasado día 12 y que consideran seguirá elevando las cifras del paro.